En un momento crítico de sequía, la Asociación Comarcal de Empresarios del Berguedà, la Asociación de Empresas de Ripollet, la Cecot, Cerdanyola Empresarial, CIESC, la Federación Empresarial del Gran Penedès, Sant Cugat Empresarial, la Unión Empresarial de Anoia y la Unión Empresarial Intersectorial han querido poner de manifiesto su preocupación al Govern de la Generalitat. Concretamente, en un comunicado, detallan su preocupación por el decreto que la semana pasada se convalidó en el Parlamento, en el que recoge medidas extraordinarias y urgentes para hacer frente a la situación de sequía excepcional. En el texto apuntan que este decreto se centra en regular las sanciones a los ayuntamientos que incumplan las dotaciones, pero no recoge ni una sola inversión que mejore o revierta la situación.
Es decir, manifiestan su preocupación por el hecho de que el decreto propuesto, en lugar de aportar soluciones recoge sanciones. Es por eso que los representantes empresariales exigen al Govern de la Generalitat que actúe ante la emergencia hídrica, y que lo haga desde el diálogo y teniendo en cuenta los diversos agentes que le pueden aportar conocimiento experto.
Especialmente, señalan la necesidad de apostar por soluciones estructurales. "El cortoplacismo dominante en la actuación política ha hecho en el pasado que una vez llueve se paralicen las inversiones que son absolutamente indispensables para dotar de robustez el sistema de abastecimiento de agua en las cuencas internas de Catalunya, y eso no puede volver a pasar", destacan.
14 años sin inversiones
En el comunicado, se lamenta de que en la sequía de 2007 y 2008 precipitó inversiones fundamentales para incrementar la disponibilidad de recursos hídricos, gracias a las cuales ahora se está retrasando la entrada en estado de emergencia. "Desgraciadamente, las inversiones para incrementar la resiliencia hídrica se detuvieron después de la inauguración de la desalinizadora del Prat, el año 2009", sentencian.
Las organizaciones firmantes denuncian que han pasado 14 años sin inversiones para incrementar la producción de agua. Reivindican que ya han integrado en su gestión la limitación en el uso del agua para actividades industriales más allá de situaciones de sequía e invierten en soluciones alternativas para mantener la actividad. Se trata de un "coste" que han "normalizado" en sus planes estratégicos.
Por eso, las entidades exponen: "De la misma manera que el tejido empresarial ha ido invirtiendo recursos para garantizar un mejor uso del agua en sus procesos productivos, los representantes empresariales reiteran la exigencia al Govern de la Generalitat de un compromiso firme en la ejecución de infraestructuras del ciclo del agua y la necesidad de un concierto social por|para el agua en el marco del diálogo con agentes socioeconómicos".