Desde el pasado 25 de febrero y hasta este martes 4 de marzo, unas 570.000 familias del País Valencià están llamadas a votar en una consulta impulsada por el Gobierno del presidente Carlos Mazón para que escojan la lengua vehicular en que quieren que sus hijos estén escolarizados: el valenciano o el castellano. La consulta está rodeada de una gran polémica y las redes sociales se están llenando de mensajes y vídeos que hacen un llamamiento a defender al valenciano. El impulsor de la consulta, el conseller de Educació, José Antonio Rovira, enmarca la iniciativa en la llamada Ley de Libertad Educativa. La idea es que la lengua escogida por las familias será la que tendrá "un peso mayor y una presencia mayor en la enseñanza" de sus hijos, y la que "se utilizará para que el alumnado aprenda a leer y escribir", desde el segundo ciclo de Infantil hasta los cursos de la ESO. Este lunes, el día antes de que se cierre la consulta, un emotivo vídeo en defensa del valenciano está triunfando en X, antiguo Twitter.

El vídeo lo protagoniza, ni más ni menos, el actor Robin Williams. Que nadie se asuste, Williams murió en el 2014 y el vídeo es el doblaje de una de las películas más míticas del difunto actor: El club de los poetas muertos (Dead Poets Society). El filme estrenado en 1989 se situaba en una escuela de secundaria conservadora para chicos y explicaba la historia de un profesor de literatura que inspira a sus estudiantes a cambiar su vida conformista a través de su enseñanza de la poesía y la literatura. La película, que ganó varios premios, de entre los cuales un Oscar al mejor guion original, lo ha utilizado un usuario de X para hacer un montaje y reivindicar al valenciano.

"Un excremento"

"Un excremento", eso es el que decía Robin Williams (el profesor John Keating) después de escuchar una teoría sobre el análisis de la poesía que uno de sus alumnos leía de un libro. Pues bien, en el vídeo sobre el valenciano, el profesor dice las mismas palabras después de escuchar como uno de sus alumnos cita unas palabras del conseller de Educació valenciano, José Antonio Rovira, hablando sobre el carácter voluntario de la lengua. "Las reglas tienen sentido solo si te ayudan a crecer. ¿Cómo pueden hacer enfrentar a la población así?", se pregunta Williams. Acto seguido, al igual que pasa en la película original, anima a sus alumnos a arrancar páginas de los libros de texto y, en el caso del montaje, les dice: "¡Arrancad la página en castellano!".

"Arrancadla", insiste el profesor ante la mirada incrédula de los alumnos; "Arrancad todo lo que perjudica nuestra lengua, hasta nunca, no quiero saber nada de este muñeco de falla", sentencia en referencia al conseller. Es más, el profesor Keating dice a sus alumnos que no sufran por arrancar las páginas sobre el conseller y tira de ironía: "No es Ausiàs March, no iréis al infierno por eso. Eso no solo es una lucha, las víctimas podrían ser vuestra voz e identidades", les advierte.

"Ahora volveréis a aprender a pensar por vosotros mismos, aprenderéis a amar a la lengua, porque una lengua que no se habla es una voz que se apaga", indica a los jóvenes estudiantes que alucinan con la reacción del profesor. Robin Williams explica a los chicos que "no leemos y escribimos en valenciano porque sea bonito, lo hacemos porque es parte de nuestra historia, nuestra historia es apasionada. El español, el inglés, el alemán… son lenguas muy importantes para nuestra interacción diaria, pero el valenciano, escucharlo, hablarlo o escribirlo son los puentes que tenemos nosotros".

Seguidamente, cita al poeta Vicent Andrés Estellés y recita a sus alumnos un fragmento del poema Assumiràs la veu d'un poble: "Tu seràs la paraula viva, la paraula viva i amarga. Ja no existiran les paraules, sinó l'home assumint la pena del seu poble, i és un silenci".