La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el actual coordinador general de los comunes, Xavier Domènech, han presentado una propuesta en firme para liderar Catalunya en común de cara a las elecciones internas para renovar la dirección, entre el 29 de junio y el 2 de julio. Las negociaciones internas han acabado finalmente con un tándem que ha dejado fuera de perfiles próximos al independentismo como el de la portavoz del grupo parlamentario de los comunes, Elisenda Alamany.
El nombre de la diputada de CatComú, próxima a Domènech, se había perfilado para liderar el espacio, pero algunas fuentes apuntan que no generaba bastante consenso en otros sectores. El líder de los comunes había encargado construir una lista transversal a Marc Parés, responsable de Programa de los comunes, pero sectores próximos a ICV y BComú plantearon los nombres de Candela López, exalcaldesa de Castelldefels (ICV), y Lucía Martín, diputada en el Congreso por ECP, como candidatas a hacer tándem con Domènech, según fuentes próximas.
Según han adelantado varios medios, la propuesta de bicefalia Domènech-Colau sentenció la polémica interna este lunes. Alamany se ha descartado finalmente para entrar a la nueva ejecutiva a partir del verano.
Voces próximas al líder de Podem aseguran al mismo tiempo, sin embargo, que el tándem Colau-Domènech no implica ningún "veto" sino que se ha optado por dirigentes de "consenso". De hecho, las mismas fuentes apuntan que Domènech contaba con Alamany para ser miembro de la ejecutiva si quería ser parte, pero la portavoz parlamentaria de los comunes ha descartado presentarse.
Fuentes próximas a la negociación explican que Alamany quiere centrarse a partir de ahora en la tarea de diputada y de portavoz del grupo parlamentario, y apuntan en este sentido que desvincularse del núcleo duro del partido no implica renunciar al Parlamento. De hecho afirman que no se ha cuestionado la portavoz de CatECP para seguir haciendo tándem con Domènech a la cámara catalana.
Algunas fuentes ven, sin embargo, en la decisión de Colau y Domènech un pacto de partidos. Así, el sector más soberanista recela de dinámicas de cuotas y avisa de que el espíritu fundacional de los comunes pretendía superar esta lógica. Otras voces pero aseguran que el partido trabaja más allá de las siglas fundacionales -CatComú nació del impulso de ICV, EUiA y BComú en abril del 2017- y que quieren hacer de las municipales la herramienta para consolidarse.
Todavía se trabaja, y hasta el viernes, para pulir el resto de la candidatura.