La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha roto el silencio después de que funcionarios municipales borraran un mural con la cara del rey emérito y la reivindicación de la libertad del rapero Pablo Hasél. Colau ha admitido que se ha cometido un "error" y que el "mural no se tendría que haber borrado".
La alcaldesa asegura que detrás no ha habido ninguna orden política para retirar el mural. "Por eso hemos pedido ya revisar el protocolo que se ha aplicado", ha explicado en un tuit. ElNacional.cat ha podido contactar este mediodía con el artista del mural, Roc Blackblock, y asegura que "desconocía" que se lo hubieran retirado. A lo largo de la tarde, sin embargo, ha recibido una disculpa formal del Ayuntamiento de Barcelona.
Hasél tilda a los comunes de "farsantes"
El rapero Pablo Hasél —que tiene la orden de entrar este viernes en prisión para cumplir con una condena por injurias a la Corona y enaltecimiento del terrorismo, entre otros delitos— ha denunciado en las redes la actuación del partido Unidas Podemos en casos como el suyo. "Ya no es que no hagan absolutamente nada para evitar nuestros encarcelamientos, es que encima ayuntamientos como el de Colau borran murales republicanos", ha escrito en un tuit donde también los tilda de farsantes.
Este mural estaba situado en el parque de les Tres Xemeneies del Poble Sec, delante de la antigua central eléctrica de la Canadenca, y no ha durado ni 24 horas. El concejal de Derechos y Ciudadanía, Marc Serra, también ha lamentado que los servicios del Ayuntamiento "lo hayan borrado por una decisión precipitada que no obedece a ninguna indicación política".
"Esta tarde he hablado con el artista Roc Blackblock para hacerle llegar disculpas en nombre del Ayuntamiento. Le he trasladado el compromiso de revisar los protocolos para que eso no vuelva a pasar", ha explicado en una serie de tuits.