De Sant Julià de Ramis (Gironès) a Roquetes (Baix Ebre), siete colegios electorales han vuelto a abrir las puertas esta noche para recordar el papel esencial la iniciativa popular que hizo posible el referéndum del 1 de octubre. El Consell de la República (CdR) ha organizado movilizaciones nocturnas simultáneas en siete centros educativos de todo Catalunya donde en el 2017 hubo cargas policiales. Uno de estos es el Instituto Jaume Balmes de Barcelona, donde centenares de personas han conmemorado las victorias-- cada voto que se depositó en las urnas-- y las pérdidas-- el millar de heridos en las cargas policiales, la víspera del quinto aniversario del referéndum de autodeterminación. En el acto celebrado en la capital, han participado testimonios de aquella jornada y lo que desencadenó después, como la miembro del CdR Teresa Vallverdú, que sufrió la violencia de la policía española mientras defendía las urnas, Roger Español, que perdió un ojo por una bala de goma, y Oriol Calvo, represaliado por las protestas postsentencia. Todos los que han intervenido en el homenaje han coincidido en reivindicar, por encima de todo, el papel de la sociedad catalana al hacer realidad aquel primero de octubre.
"La victoria de los votos es nuestra"
Durante su turno, Roger Español ha expresado el sentimiento agridulce que le viene cuando recuerda el día del referéndum, un momento histórico, que para él se oscureció cuando la policial "le robó la alegría". En las puertas del Instituto Jaume Balmes, cuatro imágenes llevadas por los manifestantes recuerdan la actuación policial que le costó un ojo. Cinco años después, cree que es más importante que nunca llenar las calles, precisamente por las víctimas de la represión policial. "La victoria de los votos es nuestra", ha querido recordar en medio de la convulsa actualidad política. Para Español, hace falta "cambiar el foco de las urnas a los votos", y honrar cada uno de los "votos manchados de sangre que entraron a las urnas". En este sentido, ha reivindicado el papel clave de la iniciativa popular, de las personas que defendieron con sus cuerpos las urnas y sin las cuales no se hubiera llevado a cabo el referéndum. Según su opinión, la gestión autonómica de Catalunya es "solo el 48% del trabajo" encomendada por el electorado, y por eso ha pedido a los asistentes "salir a las calles" este 1-O y "empujar" a los políticos independentistas "a realizar el sentido del voto del 1-O".
"El 1-O es la gran victoria del pueblo"
"El 1-O es la gran victoria del pueblo", ha leído la actriz Mont Plans en la apertura del acto. Después de los parlamentos de Español, Calvo y Vallverdú y antes de cantar a los Segadores, los manifestantes han iniciado una marcha por la isla que rodea el instituto, entonando consignas como "1 de octubre, ni olvido ni perdón" y "votamos, ganamos". En Sant Julià de Ramis, la conmemoración del quinto aniversario del 1-O se ha convertido en un llamamiento a recuperar la unidad del independentismo. De una manera u otra, todas las intervenciones al acto han lamentado la fractura actual y han instado a los partidos a ponerse de acuerdo para seguir el mandato surgido de las urnas. El alcalde de la población, Marc Puigtió, ha pedido "a los tres partidos independentistas" que encuentren "la fórmula para ir juntos": "El mundo municipal será, y el pueblo también". El responsable de Relaciones Institucionales del Consejo de la República, Toni Castellà, ha calificado la situación actual de "desastre" y espera que la ciudadanía salga masivamente en la calle mañana para demostrar que el pueblo continúa "tozudamente alzado".