El confinamiento comarcal incomoda el Ayuntamiento de Barcelona. Si ayer era la alcaldesa Ada Colau quien se estrenaba en las críticas a la restricción, hoy ha sido Jaume Collboni quien ha recogido al testigo. En declaraciones en la agencia EFE, el primer teniente de alcalde ha trasladado (de nuevo) el rechazo del consistorio al confinamiento en solitario del Barcelonés y ha pedido que en el caso de la capital el perímetro se extienda al conjunto del Àrea Metropolitana de Barcelona.
Una petición que ha calificado de "razonable", por la cual cosa ha acusado Gobierno de haber tomado una medida "política". Para el socialista, desde Interior "tienen miedo que alguien, desde fuera de Barcelona, les diga que se está privilegiando Barcelona; pero es que Barcelona es una excepción".
Asimismo, Collboni ha defendido que en el caso de Barcelona, el perímetro comarcal es absolutamente "artificioso" y ha defendido que la petición del Gobierno municipal de ampliar el confinamiento perimetral al conjunto del área metropolitana es "razonable desde el punto de vista de la seguridad sanitaria y la movilidad".
Unos términos parecido a los que ha utilizado la alcaldesa Ada Colau a la hora de valorar la medida. Según expuso a la alcaldesa en declaraciones a Betevé, la medida no es válida por Barcelona, ya que "consigue el efecto contrario de lo que se persigue", provocando grandes aglomeraciones en puntos muy concretos de la comarca.
El alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, ha dado la razón a Barcelona ya través de las redes sociales ha asegurado "coincidir" con Colau: "En el caso de los municipios del entorno de Barcelona no podemos obviar que el área metropolitana es una realidad más lógica y por eso este debería ser el criterio de cierre".
Gobierno deja la puerta abierta
A pesar del malestar, las quejas del gobierno municipal podrían llegar a buen puerto, ya que durante el día de hoy tanto el conseller Sàmper como la consellera Vergés han abierto la puerta a revisar la medida. "La solución no es fácil. Estamos trabajando en la posibilidad de que las medidas sean territorializadas, haciendo este estudio para atender las peticiones del territorio. Pero las necesidades no son las mismas, tenemos que encontrar un equilibrio", ha dicho el titular de Interior a TVE. A pesar de todo, no ha entrado en el detalle de cómo se podría dar solución a la situación.
Además, Sàmper avisa de que se tienen que abrir de miras y ver más allá de las necesidades que requiere el Àrea Metropolitana de Barcelona: "Nos vienen un par de meses que serán los últimos de este tipo de soluciones y tenemos que empatizar sin decir descalificativos como las medidas no son oportunas, lo que se pretende es salvar vidas"
Vergés, por su parte, ha defendido que a pesar de entender la preocupación por la densidad de población concentrada en Barcelona, de modificarse la medida se tiene que buscar la complicidad del resto de territorios implicados. "Cuando rompemos una referencia territorial, que nos guste o no es la que tenemos, se tiene que ver si la nueva es aceptada por toda el Área Metropolitana. Por ejemplo, si la gente de Cerdanyola del Vallès preferirá una movilidad permitida con Barcelona en ningún sitio del Vallès Occidental, que es su comarca," ha explicado en declaraciones a los medios. Además, la consellera de Salud ha recalcado que los anteriores confinamientos no han hecho saltar una alerta por la cantidad de gente concentrada en la capital.