De brazos doblados. La Comisión Europea ha insistido en el hecho de que no puede hacer nada en casos relacionados con Pegasus. La eurocomisaria de Valores y Transparencia, la checa Vera Jourová, ha lamentado que el ejecutivo comunitario no puede "actuar" en casos relacionados con la seguridad nacional. "Si es el mismo Estado el que utiliza la tecnología con el objetivo de incrementar la seguridad nacional, entonces es competencia del Estado en cuestión", ha subrayado. Esta es una idea recurrente en Bruselas: justo cuando estalló el CatalanGate, un portavoz comunitario dijo que la CE "no tiene ningún papel en la investigación del presunto uso ilegal del software de espionaje"; tres días más tarde, otro portavoz recordó que el ejecutivo europeo no tiene "ni función ni competencia" para investigar el escándalo. De hecho, este fue uno de los puntos calientes del debate celebrado justo hace una semana en el Parlamento Europeo.
Después de su comparecencia en el comité de Libertades Civiles y Justicia de la Eurocámara, Jourová ha señalado en Twitter que Bruselas espera "que las autoridades nacionales examinen a fondo estas alegaciones (sobre Pegasus) y actúen". "El uso potencialmente ilegal del software espía Pegasus es inaceptable y peligroso para la democracia", ha añadido. En esta línea se ha expresado en la mencionada comisión, donde ha lamentado "el abuso" de tecnologías como Pegasus para espiar "opositores políticos y especialmente periodistas". La eurocomisaria ha dicho estar "extremadamente preocupada" por el espionaje y ha remarcado que hay que investigar los casos.
También ha asegurado que el caso de España es "más difícil" porque se han espiado también miembros del Gobierno. "La seguridad nacional es una cosa importantísima, pero también lo son la privacidad y la protección de datos", ha subrayado. Para acabar su intervención, Jourová ha dicho que no saben quién está detrás de los casos de espionaje, que también han afectado a miembros de la CE como el eurocomisario de Justicia, Didier Reynders. Por este motivo, la eurocomisaria ha afirmado que se están analizando los teléfonos móviles de miembros del ejecutivo comunitario, entre ellos el suyo.
El Parlamento Europeo constituyó la comisión que investiga Pegasus justo después de que estallara el CatalanGate. Este lunes asistieron expertos en ciberseguridad al comité, que "no dejaron ninguna duda sobre la extrema peligrosidad de este tipo de software". Así lo consideró el eurodiputado de Junts Carles Puigdemont, que en un tuit aseguró que Pegasus "sea de curso legal entre los países europeos es una vergüenza". "Una bomba a la democracia", añadió.