Madrid cuenta los días para acoger la cumbre de la OTAN, que se celebrará entre el 29 y el 30 de junio y será una de las citas más importantes del año para la capital del Estado. Con el foco mediático a encima, ya han empezado los preparativos y los madrileños verán afectado su ritmo de vida diario, mientras la ciudad se llena de hasta 40 delegaciones de países de todo el mundo. Para empezar, la ciudad se blindará con más de 10.000 agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: 6.500 policías nacionales, 2.400 guardias civiles y, como mínimo, 1.200 policías municipales, aparte de los dispositivos de seguridad de la Casa Real y los agentes privados de Ifema, el pabellón dónde se desarrollarán la mayoría de actos de la cumbre. Con todo, no está previsto que también se despliegue el ejército. Además, tampoco se contempla, a estas alturas, aumentar el nivel de la alerta terrorista y no se ha aclarado si se cerrará el espacio aéreo, como sí que se hizo durante la coronación de Felipe VI. Lo que sí que pondrán en marcha es un sistema de vigilancia para evitar la presencia de drones y reforzarán la seguridad cibernética para evitar hackejos.
¿Quién asiste a la cumbre?
Madrid se convertirá en el epicentro de la política internacional durante estos dos días y lo quieren tener todo a punto para reducir al máximo el margen de error ante la presencia de presidentes y primeros ministros de todo el mundo con hasta 40 delegaciones. Entre estas serán los 30 países que forman parte de la Alianza, pero también la del secretario general del organismo, Jeans Stoltenberg y las de Suecia y Finlandia, países invitados. De esta manera, estarán Joe Biden (Estados Unidos), Emmanuel Macron (Francia), Boris Johnson (Reino Unido), Olaf Scholz (Alemania) o Justin Trudeau (Canadá), entre muchos otros (se espera que lleguen 5.000 personas en total) en un contexto marcado por la guerra de Ucrania. Este conflicto hace que la cumbre tenga especial relevancia, ya que con la invasión rusa, el mundo ha vuelto a mirar hacia la OTAN.
En España, el otro partido de la coalición, Unidas Podemos todavía no ha decidido si asistirá o no a los actos. Al acontecimiento para conmemorar los 40 años de la entrada de España en la alianza, no va asistir ninguno de los ministros, pero en los últimos días, la vicepresidenta Yolanda Díaz ha sopesado la opción de estar presente.
Afectaciones al tráfico
La celebración de la cumbre también afectará al tráfico. Aunque la mayoría de actos tendrán lugar en Ifema, también habrá actos en el Palacio Real, en los museos del Prado y el Reina Sofía, así como la Granja de San Ildefonso, en Segovia. Por este motivo, todos estos puntos, los accesos y salidas de la ciudad, los hoteles donde se alojen los mandatarios y las sedes diplomáticas estarán bajo un dispositivo de seguridad excepcional que pondrá la ciudad y la paciencia de los madrileños contra las cuerdas. Para evitar colapsos, el ministerio de Interior ha pedido a las empresas que incentiven el teletrabajo durante las jornadas que dura la cumbre. Además, se ha hecho un llamamiento a la comprensión de la ciudadanía: esta cumbre, dicen, supone una "gran oportunidad" por la imagen de la ciudad, y del conjunto del Estado, que se proyectará en todo el mundo, algo que compensa sus incomodidades.