La comparecencia del president Pere Aragonès por la reforma del Código Penal sigue en el cajón. Este martes, según ha podido saber ElNacional.cat, Junts per Catalunya ha planteado a la Junta de Portaveus del Parlament que se incluyera en el orden del día del próximo pleno esta comparecencia del jefe del ejecutivo para explicar los detalles de estos cambios en el Código Penal, pero no ha habido suficiente consenso y, por lo tanto, la petición se mantiene congelada. Fuentes de Junts explican, en este sentido, que ningún otro grupo del hemiciclo ha defendido incorporar este punto en la sesión plenaria de la semana que viene.
Todo ello se remonta al 15 de noviembre cuando, después del Consell Executiu, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, anunció que el president de la Generalitat rendiría cuentas ante el Parlament porque tenía la "voluntad de detallar lo que es una mejora del Código Penal y un avance importante". Lo decía poco después de que Junts instara a Aragonès a hacerlo. "En los próximos días, tendrá la oportunidad", insistía Plaja. Todo se producía cuatro días después de que el jefe del Govern, Pedro Sánchez, anunciara que impulsaría esta reforma para eliminar el delito de sedición e incluir el de desórdenes públicos agravados. El Govern defendía que "objetivamente, es una mejora, fruto de la negociación" y aseveraba que, sin su presión, "un estado inmovilista y represivo por naturaleza" no habría sacado adelante esta iniciativa.
Petición de comparecencia registrada hace un mes y medio
Un mes después —concretamente, el 14 de diciembre—, el grupo parlamentario de Junts registraba la petición de comparecencia del president Pere Aragonès para "conocer las negociaciones entre la Generalitat y el Gobierno en relación con la reforma del Código Penal". En aquel momento, los juntaires decidían presentar esta solicitud después de una sesión de control al ejecutivo, en la que Albert Batet pidió al president que diera estas explicaciones. Batet reprochó a Aragonès que estos cambios buscaran "soluciones personales" y consideraba que, con la reforma, se hacía "pasos atrás". Por su parte, el jefe del ejecutivo hacía un llamamiento a los juntaires a "no hacer el juego" de "dividir entre represaliados de primera y segunda".
Pasado un mes y medio, en que la cuestión parecía aparcada, la petición ha planeado este 31 de enero en la Junta de Portaveus, pero sin que esta se haya incluido en el orden del día del próximo pleno. Sobre esta sesión plenaria —que será la segunda de 2023— será de solo dos jornadas, ya que empezará el próximo miércoles 8 de febrero con la sesión de control al Govern y acabará el jueves 9 por la tarde.