Los comunes piden a ERC que "enmiende su error" y tire atrás el Plan Director Urbanístico (PDU) del Hard Rock y lo condicionan a la negociación de presupuestos. Dos días antes de que se debata la ley de presupuestos en el Parlament, el portavoz de Catalunya en Comú, Joan Mena, ha asegurado que este macroproyecto "lo incluyen por imposición del PSC y de Illa". Así, ha pedido un "compromiso" de los republicanos de "no tramitar el plan director y, por lo tanto, de descartarlo". Mena también ha lamentado que ERC haya amenazado con no aprobar los presupuestos del Estado si los comunes no dan luz verde a los catalanes. "No entendemos que un partido que apela a la soberanía de Catalunya quiera que los presupuestos de Catalunya se decidan en Madrid", ha manifestado al portavoz.
Mena ha querido desvincular las negociaciones de los presupuestos del Estado con las cuentas de la Generalitat de Catalunya. "No tiene nada que ver", ha dicho Mena, que, en el caso de los presupuestos estatales, les tocará decidir sobre este aspecto a los grupos parlamentarios del Congreso. Además, el portavoz de los comunes ha asegurado que su formación no ha recibido "ninguna contrapropuesta" por parte del Govern de Pere Aragonès a su exigencia que descarte el Plan Director Urbanístico (PDU) del Hard Rock, y ha reiterado que su formación no se plantea una abstención en las cuentas.
Descarta una abstención
"Sigue no siendo una opción. Ya hemos dicho más de una vez que queremos aprobar estos presupuestos y que no estaremos en una abstención", ha subrayado Mena, que ha insistido en que los republicanos no pueden esperar más tiempo a tomar una decisión sobre el proyecto del Hard Rock. Ha pedido a ERC que decida si quiere un modelo de país "fundamentado en las antiguas ideas de Convergència" o por uno que centre sus esfuerzos a transformar la industria y que apueste por la innovación, la ciencia y la tecnología.
En la misma rueda de prensa para repasar la actualidad informativa, Mena ha calificado la eventual aprobación de la amnistía jueves próxima de "gran paso de país para acabar con la desjudicialización". Los comunes han subrayado que ahora se abre una "nueva etapa en España y en Catalunya donde el diálogo y la política tendrán un espacio central que permitan trabajar un nuevo futuro entre Catalunya y España". Preguntado por si ahora se podrá abrir la puerta a un referéndum acordado con el Estado, Mena ha afirmado que es el momento de que "todo el mundo ponga sus planteamientos sobre la mesa".
Nueva reunión sin frutos
El Govern de Esquerra Republicana necesita a estas alturas el voto de dos diputados para poder tirar adelante las cuentas. Lo necesitará antes del pleno de este próximo miércoles, donde empezará la tramitación parlamentaria del proyecto de ley aprobado hace dos semanas al Consell Executiu. A estas alturas, Aragonès solo cuenta con los 33 votos de Esquerra Republicana y los otros 33 del PSC. Los otros grupos parlamentarios, tanto Junts, como los comunes, han presentado una enmienda a la totalidad, que se pueden retirar en el último minuto. En las próximas horas seguirán las conversaciones entre republicanos y comunes, mientras que el Govern y Junts apuntan a un desacuerdo.
De hecho, este mismo lunes el ejecutivo y los comunes se han vuelto a reunir en el Palau de la Generalitat. Según fuentes de los comunes, el encuentro no ha provocado "ningún avance significativo", a pesar de que las dos partes se han instado a seguir negociando. Al encuentro, ha asistido la secretaria general de Presidencia, Núria Cuenca; el secretario general de Economía, Josep Maria Aguirre; y el director general de coordinación interdepartamental, Marc Ramentol.