La comunidad chilena de Barcelona ha recordado este Once de Septiembre, la muerte el año 1973 en manos de la dictadura de Pinochet del presidente chileno a Salvador Allende. Como cada año, el homenaje se ha hecho en la plaza que lleva su nombre al barrio del Carmel, donde también se ha recordado el 85.º aniversario del viaje del Winnipeg, el barco que el poeta Pablo Neruda organizó para trasladar de Francia a Chile a 2.200 personas refugiadas españolas que malvivían en campos de concentración durante la Guerra Civil. Entre las autoridades asistentes al acto, había el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni y el conseller de la Presidencia, Albert Dalmau, acompañados de otros dirigentes del PSC, ERC y Comuns. Entre los asistentes, también estaba Eulogio Dávalos, músico y guitarrista chileno que huyó de la dictadura de Pinochet y que es presidente honorífico del Centro Salvador Allende en Barcelona.
En el discurso de homenaje a Allende, a cargo de la periodista y escritora Sílvia Tarragona, se ha querido valorar el sentimiento de hermandad entre el pueblo chileno y catalán, remarcando la valentía y solidaridad de Pablo Neruda, que puso en marcha el viaje del Winnipeg. Neruda, que había sido cónsul de Chile a Barcelona, lideró esta travesía que duró treinta días hasta llegar al puerto de Valparaíso, donde las autoridades chilenas recibieron a los refugiados españoles que huían de Francia. Entre los chilenos que acogieron con los brazos abiertos a los refugiados, se encontraba un joven médico, Salvador Allende, que se acabaría convirtiendo en una figura que cambiaría la historia del país. Allende, acabaría su proyecto político y vital el 11 de septiembre de 1974, durante el golpe de Estado militar del dictador Pinochet, que supondría su muerte y el comienzo de un periodo oscuro en Chile que duró cerca de dos décadas.
Sobre la acogida de los refugiados, la periodista ha asegurado que podemos encontrar "paralelismos" con los momentos actuales, refiriéndose al debate a que hay en torno a la inmigración y las personas recién llegadas. Tarragona ha apelado a la solidaridad del pueblo catalán y ha alertado del peligro de los discursos xenófobos y totalitaristas. También ha pedido a la clase política y a los medios más implicación para frenarlo. Durante el acto se ha hecho un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas y represaliadas, donde se han escuchado las últimas palabras del presidente chileno, acabando con la ofrenda floral institucional en su busto. El himno de Chile, Los Segadors, así como la canción 'Venceremos' y la traca de los Trabucaires de Perot Rocaguinarda y los componentes de Foc, han cerrado el homenaje.