Miles de personas, 200.000 según la Guardia Urbana, se han concentrado esta noche en el cruce de la avenida Diagonal con el paseo de Gràcia de Barcelona para reclamar la libertad de los presidentes de la Assemblea y de Òmnium, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, encarcelados ayer para la Audiencia Nacional bajo la acusación de sedición.

"No pedimos clemencia. ¡Exigimos justicia"!, ha estallado la actriz Sílvia Bel al leer el manifiesto del acto, que se ha cerrado con cinco minutos de silencio durante los cuales los asistentes sostenían velas encendidas.

Los parlamentos han empezado con tres cuartos de hora de retraso, el tiempo necesario para montar el escenario portátil que se ha instalado en medio del emblemático cruce de dos vías claves de la ciudad. Miles de personas llenaban ya a aquella hora la Diagonal hasta Francesc Macià, se desparramaban paseo de Gràcia abajo y subían por los Jardinets.

Tanto Agustí Alcoberro, que ha hablado en nombre de la Asamblea, como Marcel Mauri, que lo ha hecho en nombre de Òmnium, han advertido que el encarcelamiento de los dos responsables de las entidades no detendrá la movilización en la calle. Y la convocatoria de esta noche, organizada en 24 horas, ha querido ser la demostración.

"Por más personas que nos encarcelen, siempre tendremos relevo, y el relevo es tan o más potente que aquellos que tendremos que dejar el sitio", ha advertido Alcoberro.

En el mismo sentido, Mauri ha dejado claro que "los Jordis son los primeros presos políticos que tenemos" pero mientras estén en la prisión habrá alguien que subirá al escenario para defender las libertades individuales y la democracia. Esta noche, se han subido, escoltando a los oradores, todas los miembros de la dirección de Òmnium y de la Assemblea.

Parlament y Govern

Entre los asistentes, la presidenta del Parlament i expresidenta de l'ANC, Carme Forcadell, visiblemente emocionada; el vicepresident del Govern, Oriol Junqueras, los consellers Raül Romeva, Jordi Turull, Joaquim Forn, Meritxell Borràs, Carles Mundó, Josep Rull, Clara Ponsatí, y Santi Vila.

La secretaria general de ERC, Marta Rovira, la coordinadora del PDeCAT, Marta Pascal, los responsables de Demócratas, Toni Castellà, y MES, Magda Casamitjana, representantes de Podem y de EUiA, de los grupos de JxSí i la CUP en el Parlament y de PDeCAT y ERC en las Cortes, alcaldes, el segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Asens, entre otros.

"Llibertat", "No tinc por", "Ni un pas enrere","No esteu sols" han sido algunos de los lemas que han coreado los asistentes, que saludaban con silbidos y gritos de "fuera las fuerzas de ocupación" al helicóptero policial que ha sobrevolado insistentemente la concentración con un potente foco.

Un solo pueblo

El manifiesto con que se ha cerrado el acto advierte que el Estado ha vuelto a cruzar una línea roja con la detención de Sànchez y Cuixart y ha cometido un error que pone "en riesgo los valores democráticos que eran la base de la Constitución de 1978".

El texto recuerda que el derecho a la manifestación es básico en cualquier democracia y acusa al Estado de actuar como una dictadura, al encarcelar a los dos responsables de las entidades por una manifestación pacífica, y cuando no se ha cometido ningún delito.

Tanto los parlamentos como el texto que se ha leído han advertido que el objetivo de estos encarcelamientos es decapitar las entidades y provocar el miedo y la división para desactivar la movilización en la calle.

"Somos un solo pueblo unido y conjurado para blindar la democracia y la libertad", proclama el manifiesto donde se tildan de injustas e ilegales las detenciones.