La asociación balear 'Amigos del Pueblo Saharaui' se ha concentrado este lunes en el barrio de Cort de Palma (Mallorca) para exigir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que "rectifique" sobre su cambio de postura hacia el Sáhara Occidental, un ya lejano viraje en favor de las posturas del gobierno del Marruecos que los protestantes califican de "traición". La presidenta de la asociación, Catalina Rosselló, ha advertido que, de acuerdo con el derecho internacional, "lo único que puede decidir su futuro es el pueblo saharaui". Con eso, remarca la responsabilidad de España como potencia administradora de su antigua colonia y aboga por un referéndum de autodeterminación en el territorio norteafricano en disputa de soberanía.
Rosellón, quien ha recordado que hace más de 25 años que la entidad convoca esta movilización en el día de Navidad, "un día de paz en el cual tendría que prevalecer la justicia", ha explicado que con esta concentración quieren "estar al lado de las familias saharauis y que sepan que no están solos". En este sentido, la asociación balear también ha querido "denunciar el silencio internacional ante una guerra desde hace tres años entre el Frente Polisario y Marruecos", subrayando que "fue Marruecos quien violó el alto al fuego".
El acto ha tenido lugar en la Plaza de Cort, donde se ha leído un manifiesto de apoyo al pueblo saharaui y alertado por la situación de "presos políticos saharauis a Marruecos" y familias de una quincena de desaparecidos desde 1975. El manifiesto también condena "las atrocidades que cometen, de manera deliberada y sistemática, las fuerzas represivas del régimen de ocupación marroquí contra la población saharaui", como "bombardeo de población civil" y "ejecuciones extrajudiciales", entre otras denuncias. Igualmente la asociación ha protestado por la no concesión de visados a los saharauis y por la agresión al artista Haddi Malainin. Además, este año la entidad también ha querido "estar al lado del pueblo palestino" enfrente del "verdadero genocidio" y la "barbarie" que están sufriendo. La concentración ha finalizado con un minuto de silencio.
Giro de Sánchez con el contexto migratorio de fondo
El territorio saharaui, antigua colonia española, fue ocupada por Marruecos en 1975 y se produjo una lucha armada que continuó hasta 1991, cuando se acordó un alto el fuego para llegar a un acuerdo de referéndum. Este acuerdo nunca se produjo, por discrepancias con quien tenía que votar, y la escalada del conflicto político llevó a una ruptura del alto el fuego en noviembre de 2020. En el contexto del reto por la migración no regulada en la frontera entre España y el Marruecos en Ceuta y Melilla, el gobierno de Pedro Sánchez propició un acercamiento con el Reino del Marruecos para mejorar las relaciones y se ha alejado poco a poco del Sáhara Occidental, cosa que el Frente Polisaro ha llegado a calificar de "traición". El delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, afirmó en enero que Marruecos utilizaba la inmigración para presionar el Gobierno y que este "cedió a los chantajes"