Un juzgado en California ha condenado a NSO Group, empresa israelí creadora del software espía Pegasus, por utilizar WhatsApp para infectar y espiar los móviles de centenares de personas por todo el mundo. La demanda la presentó Meta, compañía propietaria de WhatsApp, y denunciaba daños y perjuicios por haber aprovechado un error de la aplicación de mensajería el año 2019 por instalar el suyo programaría a 1.400 usuarios y espiarlos. Aunque la sentencia llega cinco años más tarde, genera un precedente: el juez considera que NSO es responsable del uso que terceros puedan hacer de su software.

NSO Group y su software Pegasus está detrás de casos de espionaje a activistas, abogados y políticos por todo el mundo, incluyendo Catalunya. El centro de investigación canadiense destapó que una sesentena de líderes y figuras destacadas del independentismo como Carles Puigdemont o Pere Aragonès han sido víctimas de este programa espía. El caso de que ha llegado a los juzgados californianos afecta personas de la órbita de la política estadounidense, según ha identificado Meta. Por ahora serían altos cargos del gobierno, periodistas, activistas de los derechos humanos, disidentes políticos y diplomáticos.

En este caso, Meta denunciaba que se había utilizado un error de su aplicación para espiar a casi 1.500 usuarios. Es decir, que sin permiso se había aprovechado su plataforma para espiar a algunos de sus usuarios. Por su parte, NSO Group se intentó lavar las manos alegando que sus clientes gubernamentales controlan el uso de Pegasus y son los responsables de la piratería realizada con él. Sin embargo, nada de eso ha convencido al juez, quien ha escrito la primera sentencia contra una compañía que genera software espía por el abuso que hacen los estados a quienes lo vende.

Novedades con el uso de Pegasus contra el independentismo

El pasado jueves, un informe de los Mossos d'Esquadra ratificaba que el móvil de Pere Aragonès estuvo infectado con Pegasus un año sin el aval del Tribunal Supremo. Aragonès tuvo el teléfono con el software malicioso desde el 2018, aunque el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) no lo autorizó hasta julio del 2019.

En la red social X, Pere Aragonès lamentó que su vida "personal y política" haya sido espiada "ilegalmente" entre el 2018 y el 2020. "Ahora lo certifica también un análisis pericial policial. Es la enésima demostración. El CNI y todos los implicados tienen que asumir la responsabilidad. Iremos hasta el final. No vale todo. ¡Sigamos!", concluyó.