La seria advertencia a Ciudadanos por parte del presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, a raíz de sus acuerdos con el partido ultra Vox, ha sido tratada con condescendencia por la formación de Albert Rivera.
A pesar de que el mandatario francés y líder de La República en Marcha ha avisado de que el flirteo de Ciudadanos con la ultraderecha les podría costar la expulsión del grupo liberal de qué los dos partidos forman parte, Renew Europe (anteriormente ALDE), la respuesta de Ciudadanos ha sido eludir cualquier comentario sobre los posibles pactos a que acabe llegando con Vox y, a la vez, se ha puesto una madalla diciendo que la formación de Macron forma parte del mismo grupo europeo "gracias a Ciudadanos".
De hecho, el partido de Rivera asegura que mantiene una colaboración "estrecha" con el partido de Macron, "y todavía más desde que se han sumado, gracias a Ciudadanos, al grupo liberal europeo", y ha añadido con una cierta superioridad que la formación españolista "ha aumentado su representación al grupo y tendrá un papel principal en el nuevo Parlamento".
Con el mismo tono perdonavidas, Ciudadanos asegura que el partido de Macron —que gobierna Francia, que en las elecciones europeas empató en el primer lugar con los ultras de Le Pen y que sumó 23 eurodiputados— "es un apoyo importante para Ciudadanos", que quedó en tercer lugar en España —cuarto en Catalunya— con siete eurodiputados.