Luz verde sin sorpresas. Con una abrumadora mayoría, el Congreso de los Diputados ha ratificado el real decreto ley que acordaron el PSOE y Junts hace quince días después de que los juntaires tumbaran el decreto ómnibus que había impulsado el Gobierno inicialmente (y sin consenso). El nuevo texto recuperaba las medidas sociales de aquella norma: incluía, entre otras cuestiones, la revalorización de las pensiones (una subida del 2,8% y de cerca de un 6% en las pensiones mínimas), las bonificaciones al transporte público, las ayudas para los afectados por la DANA. También contempla la suspensión de los desahucios para familias vulnerables, con la incorporación de un sistema público de avales y garantías para propietarios y arrendatarios, y la prohibición de interrumpir los suministros básicos de agua, luz y gas a consumidores vulnerables. Además, el PSOE acabó reculando y aceptó tramitar la iniciativa de Junts para emplazar a Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza. Por cierto, el decreto también incluye la cesión al PNV de un palacete en París que le arrebató la dictadura franquista, que fue uno de los grandes caballos de batalla del PP. Al final, la votación se ha saldado con la única oposición de Vox: 315 votos a favor, 33 en contra y una abstención.
“¿Alguien puede explicar por qué motivo presentaron un decreto sin haber negociado el conjunto del documento con la formación que le podía dar los votos favorables? ¿Alguien puede explicar por qué no presentaron un decreto con las medidas más sensibles y más urgentes que sí estaban habladas y tenían el voto de Junts desde el primer momento?”, se ha preguntado Isidre Gavín durante su intervención. El diputado de Junts ha recriminado al PSOE que “manipulara los miedos y la indignación de la gente” y utilizara la votación como un “arma partidista para sacar provecho”. Y ha ido un paso más allá: “Una de las consecuencias de todo esto es que durante unos días no se habló de la gran cantidad de investigaciones y escándalos que tienen activados”. “¿Es por eso que presentaron un decreto no consensuado?”, se ha preguntado. El mismo día que el Consejo de Ministros aprobó el decreto, Míriam Nogueras sacó pecho de la negociación: “Si quiere aprobar reales decretos, Sánchez tiene que negociar con todos los partidos de los que necesita los votos para aprobar iniciativas”, recordó la portavoz de Junts en el Congreso. “Hoy, el real decreto ómnibus es historia y ha desaparecido”, reivindicó. “Estamos consiguiendo hacer que aquello que nos dicen que es imposible sea posible”, remachó.
Desde de Esquerra Republicana, la diputada Inés Granollers ha lamentado hoy que el PSOE “juegue” con temas tan delicados como las ayudas del transporte o las pensiones y ha criticado que el decreto ómnibus cayera por los votos de las “derechas” de Catalunya y España. “Viven en otro mundo”, ha añadido en alusión al PP, Vox y Junts. Y también ha enviado un mensaje a la Moncloa: “Hagan el trabajo bien hecho, o les saldrá muy perjudicial en otros temas”, ha avisado. Y ha reprobado el “espectáculo” de los socialistas de “llevarlo todo al límite”, cosa que acaba dando alas a las opciones populistas y de extrema derecha.
El PP avala ahora el nuevo decreto
La sorpresa saltó cuando el PP, el día siguiente del Consejo de Ministros y después de haber acusado al PSOE de “someterse a la humillación” de Carles Puigdemont, anunciaron que votarían a favor del nuevo texto. “No merecen la confianza de nadie, pero los españoles no son culpables de la falta de integridad del Gobierno”, argumentaron. “Votaremos ‘sí’ a esta rectificación. Que su incompetencia y debilidad no perjudique a quien no se lo merece”, justificaron. Dos días más tarde, Alberto Núñez Feijóo puso voz a ese argumento: “Sabemos que Sánchez esperaba y deseaba que hiciéramos al contrario de lo que haremos y, en consecuencia, votaremos para no hacer el juego a su demagogia”, afirmó en un acto sobre vivienda, en el que asumió que su voto “no alterará el resultado para ninguna de las decisiones” con las que no están de acuerdo. Hoy, durante el debate, el diputado popular Jaime de Olano ha defendido el cambio de posición de los populares con dos argumentos: el decreto ha pasado de ser “ómnibus” a “microbús” e incluye “importantes modificaciones”, con una reducción en el número de medidas. “El PP dijo que aprobaría la subida de las pensiones, las ayudas al transporte y por la DANA, y eso es lo que hace hoy”.
Por su parte, el ministro Félix Bolaños ha reivindicado la “capacidad de diálogo” del Gobierno con el resto de partidos: “Este Gobierno ha demostrado que no deja nadie atrás”, ha sostenido. El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes también ha aprovechado para disparar contra el PP, que hace tres semanas votó en contra del decreto ómnibus: “Les agradezco que cambien su voto, a pesar de las mentiras que han vertido. Votaron en contra pensando que estaban haciendo daño al Gobierno, y no se dieron cuenta de que en realidad estaban haciendo daño a la gente”.
¿Qué más incluye el decreto? ¿Y qué queda fuera?
El decreto que se ha convalidado en la cámara baja incluye otras medidas que estaban en vigor y que ahora se han afianzado:
- La subida del 9% del Ingreso Mínimo Vital y de las pensiones no contributivas.
- La mejora del bono social de electricidad a los consumidores vulnerables.
- Las ayudas a los afectados por la erupción del volcán en la isla de la Palma.
- La prórroga del escudo antiopas para proteger las empresas de sectores estratégicos en ámbitos (como la seguridad, la salud y el orden público) frente a inversores extranjeros de la Unión Europea.
- El aumento del tope para la cotización extra, que se aplicará a los salarios superiores a 4.900 euros.
- El aumento del mecanismo de equidad intergeneracional, que se ingresa en la hucha de las pensiones y que pasará del 0,7% al 0,8%.
En cambio, han quedado fuera del decreto buena parte de las medidas tributarias y económicas, con la previsión que se contemplen en otro decreto:
- Ayudas para la compra de vehículo eléctrico.
- Las ayudas a empresas electrointensivas, que son las industrias que requieren un alto consumo de energía.
- Las entregas a cuenta para mejorar la financiación de las comunidades autónomas: cayó la partida de casi diez millones a repartir entre las comunidades.
- Los beneficios fiscales para la UEFA por la celebración de las finales de la Champions League Femenina 2024 y de la Europa League 2025.
- La deducción de entre el 20% y el 60% del IRPF por obras de mejora de la eficiencia energética de viviendas.
- La deducción del 15% del IRPF por la compra de vehículos eléctricos y de puntos de recarga.
- El endurecimiento del impuesto para las fusiones bancarias.