El Gobierno tiene que retirar las medallas al torturador Antonio González Pacheco 'Billy el Niño' así como al resto de funcionarios franquistas que actuaran en la represión de la dictadura. Así lo ha reclamado el Congreso de los Diputados, que aprobará una proposición no de ley presentada por el mismo Gobierno, para los grupos del PSOE y Unidas Podemos. Ha sido debatida este miércoles y será votada mañana por la cámara. Ha recibido un amplio apoyo, aunque previsiblemente recibirá los votos en contra de la derecha. El PP no ha revelado el sentido de su voto, pero ha sido tan crítico con el "revisionismo histórico" como Vox. Ciudadanos se ha vuelto a desmarcar de ese bloque y la ha apoyado. Los partidos que respaldan al Gobierno han pedido perdón por el retraso, habiendo fallecido ya Billy el Niño.

Por las posiciones anunciadas, la PNL recibirá los votos a favor del PSOE, Unidas Podemos, ERC, JxCat, la CUP, Ciudadanos, el PNV, EH Bildu, Más País y otras formaciones minoritarias. En contra todo indica que lo harán los diputados del PP, Vox, Navarra Suma y Fotor Asturias. Aun así, algunos grupos han considerado que el texto es insuficiente. Para empezar, la iniciativa no tiene fuerza jurídica por si misma, al tratarse de una proposición no de ley. Los socios del ejecutivo prefieren verlo en el BOE, como la exhumación de Franco. 

En primer lugar, el texto insta al Gobierno a "revocar de forma efectiva las condecoraciones y recompensas concedidas por el Estado a funcionarios y autoridades de la dictadura franquista que, antes o después de su concesión, hubieran realizado actos u observado conductas manifiestamente incompatibles con los valores democráticos y los principios rectores de protección de los derechos humanos". Esta revocación "también podrá llevarse a cabo a título póstumo cuando la persona condecorada ya haya muerto". Supondrá la pérdida de todos los derechos aparejados, también los económicos. En segundo lugar, y de forma particular, establece la revocación de las condecoraciones a Billy el Niño.

Por otra parte, la PNL considera "contrarios a la memoria democrática del Estado los reconocimientos o condecoraciones por el ejercicio de su cargo o función a funcionarios y autoridades de la dictadura franquista que hayan formado parte del aparato represivo de la dictadura franquista". Finalmente, el Congreso reclama "adoptar las iniciativas normativas necesarias para revisar e invalidar todas las distinciones, nombramientos, títulos honoríficos y otras formas de realzar personas y entidades que supongan exaltación o enaltecimiento del golpe militar de 1936, la Guerra Civil y del franquismo, así como la elaboración de un catálogo de títulos nobiliarios concedidos entre 1948 y 1978, que representen la exaltación de la Guerra Civil y dictadura, para su supresión".

Según constata la exposición de motivos, todavía se está pagando "el importe de 115 medallas policiales concedidas antes de 1979 agentes de la policía de la dictadura franquista".

Varias formaciones, especialmente las independentistas catalanas y vascas, han considerado insuficiente la PNL. En primer lugar, porque las prácticas de torturas se produjeron también después de la dictadura. En segundo lugar, porque de momento se queda en el terreno simbólico. Montse Bassa (ERC) ha denunciado que "continúa vigente el modelo de impunidad español y la necesidad de una verdadera ley de memoria histórica". Míriam Nogueras (JxCat) ha recordado que el PP y el PSOE han indultado a 39 policías condenados por torturas.

PP y Vox, contra el "revisionismo"

La derecha, sin Ciudadanos, ha cargado contra el texto. Tanto el PP como Vox han criticado lo que han llamado "revisionismo" histórico. El diputado del PP Luis Santamaría ha denunciado el "socialismo revisionista" de la Transición, y ha atribuido las culpas a Podemos. "Es impropio del socialismo que ayudó a construir la Transición", ha dicho. Por su parte, José María Sánchez (Vox) ha dejado claro que "Vox es contrario a toda pretensión absurda de revisionismo histórico".