No todo el mundo dentro del Tribunal de Cuentas está de acuerdo con la nueva persecución contra dirigentes independentistas. Así se desprende del informe de fiscalización de la acción exterior de la Generalitat entre los años 2011 y 2017, avanzado por la ACN y al que ha tenido acceso ElNacional.cat. El informe cuenta con un voto particular, el que presentó la consejera María Dolores Genaro Moya. Entre otras cosas, denuncia la urgencia con la que se quiso aprobar el documento, sin dar margen para efectuar observaciones. Pero lo más importante: cuestiona las propias conclusiones del informe, asegurando que la Generalitat no se extralimitó en sus funciones y que el órgano fiscalizador no ha hecho bien su trabajo. Hasta 35 altos cargos de la Generalitat han sido citados como responsables por este informe sesgado y exagerado.

En el escrito, Genaro recuerda que el Tribunal de Cuentas debería hacer "un juicio estrictamente técnico sobre el sometimiento a los principios de legalidad, eficiencia y económica de la actividad económica desarrollada por la Generalitat en relación con la acción exterior". En cambio, lamenta, el órgano ha incumplido los principios de "imparcialidad, claridad, concisión, equilibrio y ponderación". Recuerda que el análisis debe ser "objetivo e imparcial" y "evitando juicios de valor e interpretaciones que no están suficientemente fundamentadas".

Así, la consejera del Tribunal de Cuentas asegura textualmente que "con los datos que se indican en el informe, no parece existir en estos casos una extralimitación de la acción exterior ejercida por la Generalitat de Catalunya en relación con el ámbito competencial que le corresponde". Denuncia, además, que en algunos casos "se confiere carácter irregular al viaje o actividad como consecuencia de declaraciones efectuadas a la prensa con posterioridad al acto". Eso, sostiene el voto particular, "no desvirtúa el carácter oficial del mismo y su posible inclusión dentro de las competencias autonómicas".

En este punto, María Dolores Genaro pone ejemplos: el viaje del president Artur Mas para participar en el Segundo Encuentro de Líderes Europeo Liberaldemócratas en Amsterdam, en febrero del 2013, y el del president Carles Puigdemont a Copenague para inaugurar la delegación de la Generalitat en los países nórdicos, en agosto del 2017.

El voto particular también impugna las referencias a actividades "que parecen exceder de este ámbito competencial pero que, por su duración, características o altas factores, aparecen claramente como accesorias a una actividad principal desarrollada dentro del ámbito". Pone el ejemplo del conseller de Exteriors, Raül Romeva, que viajó a Dinamarca y al Reino Unido en mayo del 2016, "participando uno de los cuatro días en un acto cuya temática está relacionada con el proceso independentista".

"El número total de las actividades reflejadas en el informe que se consideran incursas en estos dos supuestos sería de 64", apunta la consejera del Tribunal de Cuentas.

"Medios de prueba no concluyentes"

Aparte de los viajes, el voto discrepante señala que hay "otras actividades irregulares deducidas de medios de prueba no concluyentes y que, por lo tanto, tampoco cuentan con el apoyo de evidencia adecuada y suficiente". En este sentido, la consejera destaca al menos 28 actividades "en las que la evidencia se obtiene de una nota de prensa y no de la documentación integrante de los expedientas de gasto.

María Dolores Genaro también constata al menos 52 actividades "que si bien mantienen relación con el ámbito del proceso de independencia, constituyen simples declaraciones políticas o ideológicas y expresión de opiniones, sin ningún tipo de trascendencia económica o contable". Por lo tanto, tendrían que quedar fuera del ámbito de la fiscalización del Tribunal de Cuentas.

"Importancia mayor de la que realmente es"

La conclusión final de la consejera del Tribunal de Cuentas es demoledora. "Las constantes reiteraciones en los resultados que se exponen conducen a que se produzca la impresión en el lector de que la importancia relativa de los hechos expuestos es mucho mayor de la que realmente es", asegura Genaro en el voto discrepante. Pone el ejemplo de un viaje del 24 de enero del 2017 que es citado hasta cinco veces en el informe y una en las conclusiones.

Además, en el inicio de su voto particular, la consejera denuncia la “urgencia incomprensible" con la que el Tribunal de Cuentas quiso aprobar el informe a finales de marzo de 2019, pese a sus peticiones para que se ampliara el plazo para realizar observaciones de carácter técnico. Una vulneración del procedimiento jamás vista antes, a su parecer.

Citados el 29 de junio

Según el Tribunal de Cuentas, los presuntos responsables contables de la acción exterior son un total de 35 personas, donde destacan los expresidents Mas y Puigdemont y el exvicepresident Oriol Junqueras. Hay muchos otros exconsellers: Raül Romeva, Jordi Turull, Francesc Homs, Neus Munté y Andreu Mas Colell. Han sido citados el próximo 29 de junio a las 9.30 en la sede del Tribunal de Cuentas en Madrid. Si fuera necesario, se prorrogaría también el día 30 de junio. El órgano fiscalizador les pide cantidades desorbitadas.

Por otra parte, este informe ha permitido que, tras una denuncia de la Fiscalía la semana pasada, el juzgado 18 de Barcelona haya abierto diligencias contra el exconseller de Exteriors Raül Romeva y nueve excargos más de la Generalidad.