Después de que los Mossos detuvieran a Clara Ponsatí en su retorno a Catalunya a finales de marzo, tras cinco años en el exilio, el conseller del Interior, Joan Ignasi Elena, defiende que Carles Puigdemont "tendría que poder volver a Catalunya sin ningún tipo de limitación", ya que tanto él como el resto de exiliados y represaliados por el 1-O son personas que "no han cometido ningún delito": "La única cosa que han hecho ha sido cumplir con un compromiso, con una voluntad mayoritaria del pueblo de Catalunya de poder votar", ha añadido al conseller. Con todo, ante la posibilidad de que el presidente vuelva a Catalunya sin pasar por Madrid para declarar ante el Tribunal Supremo, como hizo a su compañera eurodiputada, y que los Mossos d'Esquadra lo tengan que detener, Elena ha evitado pronunciarse sobre este escenario: "No me quiero adelantar con cosas que en estos momentos no se dan". Con todo, tal como hizo después de la detención de Ponsatí a finales de marzo, ha recordado en una entrevista a Europa Press que la policía catalana es administrativa y que, por lo tanto, actúa como policía judicial, dando cumplimiento y respuesta a las órdenes de un juez, "como a todos los países democráticos del planeta".
Tras el retorno, detención, liberación y citación judicial de Ponsatí, el abogado tanto de ella como de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, aseguró que su previsión es que el president siga los pasos de su compañera y vuelva a Catalunya antes de que acabe el año: "Ni a Clara ni a Toni ni al presidente los atemoriza una detención", indicaba Boye el pasado miércoles, 29 de marzo. Con todo, el también abogado y líder de los comuns en el Congreso de los Diputados, Jaume Asens, ha reconocido en los últimos días que no recomienda al presidente que vuelva todavía del exilio, ya que primero se tiene que pronunciar el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Y, aunque este hiciera un pronunciamiento favorable, Asens no cree que Llarena respetara la inmunidad de Puigdemont: "Sería arriesgado", resumía.
Crecimiento de los Mossos: hasta 22.000 agentes antes del 2030
Por otra parte, Elena también se ha referido al nuevo decreto de los Mossos d'Esquadra. Según el conseller, este prevé el crecimiento de la estructura de la policía catalana, "que pasará de 17.000 y pico agentes a 22.000 en el 2030". Tal como ha recordado, el anterior decreto estaba pensado para un cuerpo de máximo 18.000 agentes, y ha justificado el aumento de mandos porque "es necesario, ya que cuando crece el número de agentes, también tienen que crecer los jefes, los intendentes...". El nuevo decreto tiene que servir para que el cuerpo de los Mossos se ponga al día 11 años después del anterior.
Elena ha explicado que el decreto también valora "el trabajo que se tiene que hacer en el ámbito de las violencias machistas", por lo cual se han reforzado unidades como la Unidad Central de Agresiones Sexuales (Ucas), con la incorporación de nuevos efectivos, y se ha dado más valor en la Comisaría de Proximidad, para que tenga más presencia y medios. "Con este decreto quiero un cuerpo cada vez más tecnificado, más preparado desde el punto de vista tecnológico, queremos reforzar la investigación, la información y, al mismo tiempo, que toda esta inteligencia se extienda en el conjunto del territorio con un cuerpo mucho más presente al conjunto del país", ha concluido Elena.