El Consell per la República ha convocado hoy formalmente el referéndum sobre los Juegos de Invierno, que se celebrará desde las 10 de la mañana del 25 de junio a las 10 de la mañana del 2 de julio de forma telemática, y abierta a la población en general. El Consell se ha avanzado de esta manera al referéndum que piensa convocar el Govern, que se ha aplazado a causa de las diferencias de criterio con Aragón. Pero a diferencia de la consulta gubernamental, la del Consell no está dirigida sólo a las comarcas del Pirineo, sino que podrán participar en ella los más de 100.000 inscritos y la población mayor de 16 años de los Països Catalans que lo desee.
El Consell ha decidido poner en marcha el referéndum después de que la Sindicatura Electoral ha ratificado que se habían superado el 5% de los avales necesarios. La pregunta a la que tendrán que responder los que voten será ''¿Crees que se tienen que hacer unos Juegos Olímpicos en el Pirineo'?". Los resultados de la votación se conocerán el mismo día 2.
Por su parte, el Govern prevé celebrar dos consultas aparte del territorio, si bien no tienen fecha. A diferencia de la propuesta del Consell per la República, la consulta del Govern no se realizará en todo el territorio, durará un solo día, y será sólo presencial; en concreto, comprenderá dos consultas diferentes en dos partes diferentes del territorio, la primera será en el Alt Pirineu i Aran - "¿El Govern de la Generalitat tiene que presentar una candidatura de Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2030"?, preguntará-, y la segunda, en el Ripollès, Solsonès y Berguedà - "¿Su comarca se tiene que involucrar en el proyecto de Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2030"? -.
Con respecto al Consell per la República, el reglamento de consultas que tiene aprobado, que se basa en el sistema de consultas de Suiza, contempla que cualquier miembro del Consell pueda plantear la celebración de una consulta. Una vez aceptada por la Sindicatura Electoral, la consulta tiene que recibir el apoyo de un cinco por ciento del censo autorizado a participar, antes de que se celebre. Dado que la consulta se celebrará en todo el territorio catalán y no sólo entre los inscritos, el Consell tendrá que elaborar un registro de ciudadanos específico para esta votación. El vicepresidente del Consell, Toni Comín, comparó el mecanismo que se utilizará con el censo universal que se utilizó el 1-O, en qué se construye el registro de manera que no pueda haber fraude.