Empieza la campaña por la lista cívica de la ANC. Del 1 al 14 de marzo, la Asamblea celebra una consulta sobre la lista cívica que ha propuesto organizar el actual secretariado Nacional liderado por la presidenta de la entidad, Dolors Feliu. Como respuesta de eso, más de 130 personas se han sublevado contra esta propuesta y han hecho un llamamiento a votar "no" a través de un manifiesto abierto, al cual todos los socios se pueden adherir. Entre los firmantes de este texto, está el cantautor Lluís Llach; 4 exvicepresidentes de la Asamblea, como Jordi Pesarrodona, Josep Cruanyes, Carles Castellanos y Jaume Marfany; así como fundadores de la entidad como Toni Strubell, Carles Sastre o Blanca Serra. Los impulsores han presentado el manifiesto este martes por la mañana delante la sede de la ANC, ya que, según afirman, no los han dejado llevar a término la rueda de prensa dentro la sede de la entidad.
"Es un delirio"
"La actual propuesta de la lista cívica es un delirio", asegura uno de los portavoces de los impulsores, Josep Màsich, quien asegura que la actual propuesta de la entidad es contraria a sus estatutos. Por eso, han presentado también una denuncia ante el Comité Deontológico por "incumplimiento" de los estatutos de la organización, la Declaración Fundacional de la Asamblea, el Código Ético y la actual hoja de ruta. En el artículo 2.4, los estatutos de la Asamblea estipulan que la entidad "se mantendrá totalmente independiente de cualquier partido político, coalición electoral o grupo de electores y no se presentará a ningún tipo de elecciones". A su vez, en la declaración fundacional, se explicitaba que "por su carácter unitario y aglutinador, la ANC no participará con candidatura propia ni integrándose en ninguna candidatura en elecciones políticas de cualquier nivel". Desde la dirección recuerdan que, en la hoja de ruta 2023-2025, sin embargo, sí que se concreta esta posibilidad. El documento dice que el hecho que "la Asamblea se convierta en un partido y se presente a las elecciones no es una opción", pero que se siguen planteando el impulso de una lista cívica independiente de los partidos para defender la voluntad de los electores independentistas a las próximas elecciones en el Parlament de Catalunya". Con todo, los críticos creen que la vocación de una lista cívica tiene que ser "unitaria" y no para "fragmentar más" el espacio independentista ni lindar con los partidos.
Además, también han tildado la actual dirección de Dolors Feliu de "sectaria" y los acusan "de acelerar la pérdida de liderazgo de la Asamblea". Uno de los argumentos que ponen sobre la mesa es que la hoja de ruta fundacional de la entidad marcaba que la ANC no participaría en elecciones y se mantendría totalmente independiente de cualquier partido político y de cualquier grupo de electores.
Asimismo, el manifiesto remarca que la actual propuesta de lista cívica es "divisiva" y muchas asambleas de base se podrían ver perjudicadas por la pérdida de socios. "La lista Cívica tendría que buscar la unidad independentista y ser un elemento de fragmentación, como también marca la hoja de ruta", subrayan los impulsores del manifiesto. De hecho, exigen a la ANC que "recupere el liderazgo" y consideran que una lista cívica tendría que buscar la unidad independentista con las otras entidades del movimiento civil.
Críticas al formato de elección de los candidatos
Otro de los elementos que denuncia el manifiesto es que los candidatos del actual formado de Lista Cívica "no son votados por primarias". La propuesta de que pone sobre la mesa la entidad independentista es que los promotores propondrán las listas electorales que serán ratificadas por el Secretariado Nacional y la ciudadanía inscrita en la web de la Asamblea. "No tendrán el derecho a decidir el cabeza de lista y el orden del resto de la candidatura", denuncian los contrarios a esta propuesta.
Al mismo tiempo, opinan que los objetivos de la lista son "contradictorios", ya que "una cosa es hacer una Declaración de Independencia en el Parlament y otra hacer efectiva la República Catalana". "No se establecen los pasos, no se tiene en cuenta la represión, ni el apoyo internacional, como tampoco la orden temporal," dicen, criticando la propuesta de Dolors Feliu. De hecho, también consideran que la política de la Lista Cívica no prevé una ruptura, sino la "normalidad institucional autonomista". "No se contempla qué harán en el caso de una victoria del PSC sin mayoría alternativa", dicen poniendo sobre la mesa la posibilidad de una pérdida de la mayoría absoluta del independentismo.
Tensión entre los firmantes y la dirección de la ANC
La tensión entre los firmantes del manifiesto y la dirección de la ANC se ha hecho notar durante la lectura del manifiesto. Tal como explican los organizadores, tenían previsto hacer la rueda de prensa en una sala de la sede de la entidad, pero el actual secretariado no se lo ha querido ceder. "Se ha pedido dos veces. Primero una coordinadora y después un secretario nacional. Según los estatutos, tiene derecho a utilizar la sala, pero nos lo han denegado", explican los impulsores del manifiesto contrarios a la lista cívica, que han tildado el actual secretariado de "sectario".
Sin embargo, fuentes de la ANC explican que en la sala de prensa de la entidad no hacen ruedas de prensa que "no haya convocado directamente el Secretariado Nacional y, más concretamente, el departamento de Comunicación". Además, recuerdan que cada dos años los socios escogen los 77 miembros del Secretariado, que celebra lleno cada mes y donde se toman decisiones por|para mayorías. "Los socios participan en la elaboración de la Hoja de ruta de la entidad y votan también, entre otros, la gestión del Secretariado, las cuentas y el presupuesto. También se les consulta siempre que hay que tomar decisiones estratégicas y trascendentes", aseguran desde la entidad presidida por Dolors Feliu.