El Gobierno prevé separar y aislar a positivos por coronavirus que no tengan síntomas. De esta amanera prevé frenar una nueva propagación de la pandemia. Es por eso que, en su reunión telemática de este domingo, Pedro Sánchez ha reclamado a los presidentes autonómicos una lista de infraestructuras públicas y privadas para poder acoger a estas personas. El presidente español también les ha adelantado que entre hoy y mañana recibirán un millón de tests de covid-19.

Según confirman fuentes presentes en la reunión, Pedro Sánchez ha reclamado que este listado de infraestructuras públicas y privadas esté elaborado antes del viernes 10 de abril. Es el día que acaba el permiso retribuido por Semana Santa, y a partir del lunes 12 los trabajadores de sectores no esenciales podrán volver a sus puestos de trabajo, poniendo fin a las medidas de endurecimiento del confinamiento. El Gobierno prevé que el estado de alarma se alargue más allá del 26 de abril, pero que se vaya desescalando de forma gradual.

Esto es lo que se hizo en la provincia china de Wuhan para hacer frente a la propagación del coronavirus. En hospitales llamados Arca de Noé se alojaban pacientes sin síntomas graves pero que habían dado positivo y podían propagar rápidamente la epidemia.

Desde las diez y media de la mañana, Pedro Sánchez está manteniendo su reunión semanal con los presidentes autonómicos. Es el tercer encuentro de este tipo en el marco de la crisis del coronavirus. Hoy también le acompañan los ministros y autoridades delegadas competentes Salvador Illa, José Luis Ábalos, Fernando Grande-Marlaska y Margarita Robles.

Hacen falta tests masivos y "detección precoz"

La jefa de área del Centro de Alertas Sanitarias, la doctora María José Sierra, ha defendido que esta medida será clave en la "fase fundamental que tenemos por delante de desescalada o transición". Para hacerlo con éxito, ha señalado que hay que hacer "tests a todas las personas que inicien síntomas" para una "detección precoz de todos los casos" y su posterior aislamiento". La cuarentena en instalaciones públicas o privadas es una alternativa al confinamiento domiciliario, cuando este no garantiza el objetivo. "Esperamos que en pocas semanas podamos empezar", ha asegurado.

 

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