El matemático de la Universidad Paris-Dauphine-PSL Miquel Oliu-Barton, experto en teoría de juegos, ha propuesto en un artículo en el diario Le Monde un método "eficaz y seguro" para realizar el desconfinamiento en Francia. El objetivo es también evitar al máximo los daños en la economía, y respetar totalmente la privacidad individual.
Según este método, el desconfinamiento se produciría en tres etapas: "Primero, dividir Francia en territorios de tamaño adecuado, de unos 100.000 habitantes; segundo, identificar en ellos "zonas verdes" donde el virus está ausente o bajo control; y tercero, de forma progresiva ir fusionándose con estas zonas verdes".
En el artículo, escrito con el profesor de economía del CNRS Bary Pradelsky, se calcula que en un periodo de 2 a 4 meses toda Francia podría quedar fusionada en el color verde. El método se fundamenta en una gran agilidad en el territorio, de manera tal que se podría interactuar de zona verde a zona verde, mientras la zona roja seguiría muy vigilada.
El economista tiene desplegado este programa en un documento de Esade titulado Estrategia de salida del confinamiento hacia zonas verdes.
Miquel Oliu-Barton apunta que se han inspirado en cierta manera en el funcionamiento en red de Facebook. "Todos estamos familiarizados con la red Facebook, en la que cada persona tiene más de 300 amigos por término medio, y cada una de estas conexiones tiene un enlace en la red. La distancia entre dos personas se mide por el número de links que hay entre ellas. La idea de los 6 grados de separación, que se formuló por primera vez a finales de los años veinte, señala que todo el mundo puede ser encontrado con un máximo de 6 pasos", recuerda.
A su entender, ahora, con el problema del coronavirus y las infecciones, se produce el mismo esquema, pero con el criterio de la proximidad física. Eso es lo que motivó que para cortar de entrada el problema muchos países optaran por el confinamiento.
Insiste en que en el desconfinamiento se debe volver a tener en cuenta el modelo inicial de red. "En vez de imponer un radio de movimiento para cada individuo, proponemos dejar que la gente se mueva dentro de áreas desconectadas, que pueden ser ciudades o distritos, para cortar la red de proximidad física en piezas desconectadas entre sí, y evitar así viajar por todo el territorio, explica.
Basándose en eso, la propuesta pasa por ir uniendo de forma progresiva las zonas seguras, las zonas denominadas verdes, con la ayuda de un alto nivel de pruebas.
"Nosotros creemos que esta segunda fase se puede organizar de manera segura, eficiente y fácilmente controlable. Al reconstruir la sociedad y las interacciones económicas a través de la ampliación progresiva de zonas verdes llegaremos a la re-unificación del país en un plazo de dos a cuatro meses", indica.
"Nuestro enfoque no requiere el seguimiento de los habitantes a nivel personal, y por lo tanto, respeta la privacidad individual. Y es un enfoque compatible con la mayoría de medidas que actualmente están en discusión", argumenta.
Es una propuesta territorial.