"A partir de hoy, la autoridad competente en todo el territorio será el Gobierno de España". De esta manera ha sintetizado Pedro Sánchez el estado de alarma en respuesta al coronavirus, aprobado este sábado por el Consejo de Ministros después de siete horas de reunión nada fáciles. El presidente español ha instado a las comunidades autónomas a "situarse detrás" de La Moncloa y remar juntos, bajo la dirección única de la Administración del Estado, que centralizará competencias de Sanidad, Interior y Transportes. "El virus no distingue de territorios, colores políticos o ideologías", ha recordado dirigiéndose a los presidentes autonómicos. El presidente Quim Torra y el lehendakari Íñigo Urkulllu ya han alertado sobre una posible invasión de competencias. La pandemia en el Estado español ya ha superado los 6.000 casos y se acerca a los 200 muertos. Las medidas excepcionales durarán al menos quince días. El Gobierno descarta cualquier confinamiento de un territorio, ya sea la Comunidad de Madrid o Catalunya, como pidió la Generalitat.
Las medidas del decreto, que llegan con retraso, suponen una limitación prácticamente total de los movimientos de los ciudadanos durante la vigencia del estado de alarma, al menos quince días prorrogables. Los españoles sólo podrán circular para actividades esenciales, como la adquisición de alimentos o de productos farmacéuticos o por otros motivos de fuerza mayor. La batería de medidas es amplia, y comporta una gran recentralización. Las Fuerzas Armadas se movilizan y quedan bajo la tutela del Ministerio del Interior. Las policías autonómicas, como los Mossos d'Esquadra, también quedan bajo la dirección del ministro Fernando Grande-Marlaska. Tres ministros más tendrán competencias por encima de las autoridades autonómicas, aunque las competencias sean de las comunidades.
En rueda de prensa telemática este sábado por la noche, Pedro Sánchez ha dejado claras las principales directrices: durará al menos quince días, entrará en vigor esta misma noche y "bajo mi dirección". Habrá cuatro "autoridades competentes delegadas" más: la ministra de Defensa, Margarita Robles, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y el ministro de Sanidad, Salvador Illa. En sus ámbitos podrán adoptar cualquier medida que consideren necesaria, ya sea de acuerdo con las comunidades autónomas o unilateralmente.
Una pregunta reiterada por los medios de comunicación ha sido el confinamiento de Catalunya solicitado por el Govern de la Generalitat. Se ha negado rotundamente a ello porque considera que no es necesario. "El virus no atiende a diferencias territoriales y fronteras. Por eso el corazón del real decreto es proteger a la ciudadanía", ha señalado el presidente español. Ha subrayado que las restricciones de circulación afectan a todos los ciudadanos españoles, vivan donde vivan, que no podrán desplazarse más allá de los trayectos imprescindibles. Por lo tanto, ha dicho que no se producirán escenas como la llegada masiva de madrileños a otros puntos del Estado de estos últimos días.
Sánchez ha hecho referencia a la reunión por videoconferencia que mantendrá este domingo con los presidentes autonómicos, a los que ha pedido "situarse detrás del gobierno de España y entre todos ganar al virus". En este sentido, ha defendido que "no hay ideologías ni territorios", sino que "nuestros ciudadanos son lo primero". A los dirigentes de las comunidades les trasladará el conjunto de acciones y escuchará sus "sugerencias". Ha reclamado que "no equivocarse de enemigos cuando estamos ante nuestro verdadero enemigo": el coronavirus.
"Esta batalla la vamos a ganar. Lo importante es que el precio sea el mínimo", ha defendido el mandatario español, que ha defendido su gestión siguiendo "la mayor excelencia y rigor científicos". Ha garantizado que se dedicarán "todos los recursos que sean necesarios" y que no "les temblará la mano para ganar al virus". Ha señalado que, de momento, el estado de alarma durará quince días, que son prorrogables con autorización del Congreso, un escenario de prórroga que no ha descartado. "Tardaremos tiempo a ver la cuotinaeidad", ha admitido.
Discrepancias con Podemos
Las discrepancias entre el PSOE y Unidas Podemos han alargado la reunión extraordinaria del Consejo de Ministros durante siete horas. No se recuerda una reunión del Gobierno tan larga en muchos años. El principal punto de conflicto han sido las medidas económicas y laborales, que finalmente han decidido aplazar hasta els martes, que se abordarán en la reunión ordinaria del Consejo de Ministros. Sánchez ha querido dejar claro que el "debate" ha sido "enriquecedor" y que ha servido para "mejorar" el decreto ley de estado de alarma. "Tanto el vicepresidente (Iglesias) como el resto de miembros hemos tenido un debate sosegado, intenso, muy detallado", ha asegurado. La comparecencia, que inicialmente estaba prevista para las dos del mediodía, se ha acabado celebrando a las nueve de la noche.
Elecciones, mejor que no
Preguntado sobre las elecciones vascas y gallegas del próximo 5 de abril, Pedro Sánchez ha dejado la decisión en manos de las fuerzas políticas de estas comunidades, que tendrán que decidir. No obstante, ha trasladado también la opinión de su gobierno: que es "poco razonable celebrar elecciones el 5 de abril con estas medidas de restricción" y con una posible amenaza de coronavirus todavía latente.
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