El PP de la ciudad de Valencia quedará en manos de una junta rectora una vez la dirección autonómica –con el apoyo del PP estatal– ha decidido disolver la cúpula directiva local a consecuencia de la Operación Taula contra una presunta trama de corrupción y en la cual se investigan todas las estructuras del PP, tanto a nivel local, como provincial y autonómico, por una presunta financiación ilegal y blanqueo de capitales y en el marco de la cual han sido detenidos varias personalidades vinculadas al PP como el expresidente de la Diputación, Alfonso Rus.
Según han explicado fuentes del PPCV, próximamente y "con tranquilidad" se nombrará una junta rectora para tomar el control de la agrupación local, el presidente del cual hasta ahora, Alfonso Novo, está imputado en el llamado caso Imelsa. Además, decenas de ediles, exconcejales y asesores del grupo popular en el Ayuntamiento de Valencia están declarando hoy ante la Guardia Civil en relación con aportaciones dinerarias realizadas al partido.
La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, ya había advertido que si se mantenía la gravedad de los hechos y la imputación de Novo después de su declaración ante el juez se podría nombrar una gestora para hacerse el cargo del partido.
Por su parte, desde la dirección nacional del PP se ha puesto de manifiesto el apoyo a las decisiones que tomen los responsables regionales.