La exsecretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, enviaba a una persona con el coche oficial del partido para recoger al comisario José Manuel Villarejo y, así, que entrara por el garaje de la sede central de los populares. De esta forma, se evitaba que hubiera constancia de la visita de Villarejo y era la metodología que se adoptaba para poder reunirse con Cospedal en Génova 13. Eso es lo que este miércoles ha explicado ante el juez del caso Kitchen el que fue jefe de gabinete de la exministra de Defensa, José Luis Ortiz, según adelanta la Cadena SER.
De hecho, Ortiz ha detallado que María Dolores de Cospedal le llamaba y le pedía que cogiera el coche oficial para ir a buscar a Villarejo. El punto de recogida era Riofrío, una cafetería que cerró ya hace unos años y que se encontraba a 40 metros de la sede central del Partido Popular en Madrid, justo en la acera contraria de la calle Génova.
No constaba a las visitas
De esta forma, José Luis Ortiz y José Manuel Villarejo iban en coche hasta el garaje de Génova 13 y así se evitaba que hubiera constancia en los libros oficiales de visitas a la sede de los encuentros entre el excomisario y Cospedal.
En concreto, el que fue jefe de gabinete de la exsecretaria general de los populares ha detallado en su declaración que Cospedal le pidió hacer eso unas "8 o 10 veces", sin descartar que la exministra de Defensa se encontrara con Villarejo en alguna ocasión más y que hubiera concertado visitas a través de sus secretarias.
Esta revelación llega un día después de que la propia María Dolores de Cospedal reconociera en sede judicial que se reunió con el comisario jubilado "cuatro o cinco veces" y manifestó que "quizás" habló con él alguna otra vez "por teléfono".
Operación Kitchen
El juzgado de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, cuyo titular es Manuel García Castellón, investiga el caso Kitchen, una presunta operación parapolicial que se tramó desde el Ministerio del Interior para practicar espionaje ilegal a Luis Bárcenas. En el marco de esta investigación, Castellón ha tomado declaración esta semana en calidad de imputados a María Dolores de Cospedal, a su marido Ignacio López del Hierro y al jefe de gabinete de Cospedal, José Luis Ortiz.
La que también fue presidenta de Castilla-La Mancha se desvinculó de este entramado y también descartó que hubiera formado parte del mismo el PP. Con respecto a las anotaciones que figuran en las agendas de José Manuel Villarejo y que podrían implicarla en esta operación, Cospedal negó conocer el porqué de estas notas del excomisario. En todo caso, admitió que se reunió con él, pero que lo hizo por el hecho de que quería saber "el origen de la campaña mediática" contra ella y su marido y sabía que Villarejo tenía "una buena relación con los medios de comunicación".