El exvicepresidente de la Mesa del Parlament Josep Costa ha apuntado a la figura del secretario general del Parlament como responsable de las licencias por edad. Costa ha asegurado que los secretarios generales de la cámara han aprobado "a escondidas" las "jubilaciones doradas". Además, ha argumentado que el único cargo político que podía saber el régimen de las licencias por edad es el presidente del Parlament, ya que, según ha explicado, firman las nóminas cada mes. El jurista ha pedido que "se explique toda la verdad" en cuentas "de intoxicar".

La secretaria general del Parlament, el año que se aprobó por primera vez el régimen de licencias por edad, en el 2008, era Imma Folchi, que estuvo al cargo desde 1999 en el 2015. Pere Sol la siguió y mantuvo el cargo un año, hasta el 2016. Este año, Xavier Muro cogió los mandos de la secretaría general de la cámara hasta que el año 2021 fue destituido y renovado por Esther Andreu, que es la actual secretaría general del Parlamento. Según las informaciones reveladas por el diario Ahora, los secretarios generales que firmaron estos sueldos, Imma Folchi y Pere Sol, se beneficiaron de este régimen cobrando hasta 10.000 euros mensuales.

La Mesa acaba con las licencias

La Mesa del Parlament se ha comprometido este martes a trabajar para eliminar al régimen especial que permite a los funcionarios de la Cámara catalana seguir cobrando a pesar de no trabajar, conocido como la "licencia de edad", y ha coincidido por unanimidad en la necesidad en encontrar un nuevo acuerdo con los trabajadores de la Cámara, después de que el diario Ahora hiciera público que la Cámara catalana paga anualmente 1,7 millones de euros a 21 funcionarios que no trabajan y tienen más de 60 años. Antes de que estallara esta polémica mediática, la presidenta del Parlament, Laura Borràs, ya había empezado a actuar para revertir una situación que situó como "contraproducente", siendo la primera presidenta de la Cámara que abordaba esta cuestión desde que entró en vigor el año 2008.

La reforma de esta anomalía impulsada por Borràs se tradujo al reducir de cinco en tres los años en que los funcionarios pueden cobrar el sueldo sin trabajar, una medida que se aprobó por unanimidad en la Mesa del pasado 21 de diciembre. Entonces nadie dijo nada, pero con la resonancia de la polémica los grupos se han empezado a desdecir del acuerdo de antes de Navidad, y es así como han acordado en la Mesa de este martes trabajar para buscar un nuevo pacto que impida que haya trabajadores que cobren sin ir a trabajar los últimos años antes de jubilarse. Según fuentes de la Cámara catalana hoy se ha llegado a este acuerdo. Pero eso no significa que la solución llegue de forma automática ni que el acuerdo del 2021 quede anulado automáticamente, sino que es mejor una declaración de intenciones que ahora se tendrá que materializar negociando con los trabajadores.

Trabajar para no hacer nada

Hasta 21 funcionarios del Parlament están acogidos en esta figura, entre ellos, dos exsecretarios generales que cobran más de 10.000 euros en el mes. Los que cobran menos y que están en esta misma situación son los ujieres auxiliares, que cobran 3.800 euros mensuales. En total, se han pagado anualmente 1,7 millones de euros a funcionarios que no estaban trabajando en la cámara.

Las personas que se podían acoger a este régimen eran las que hacía 15 años que trabajaban en el Parlamento y pueden seguir con esta situación hasta la jubilación. Eso llevaba al hecho de que había puestos de trabajo sin nadie que los cubriera, pero tampoco se podía contratar a nadie nueve, ya que la peculiaridad de este permiso no lo permitía.