Se ha creado una asociación en Perpinyà para denunciar que el alcalde ultra, Louis Alliot, "descatalaniza" la capital de la Catalunya Nord. Según ha informado este sábado el medio L'Indépendant, la asociación, que todavía no se ha bautizado, reunirá políticos antiguos o actualmente electos y miembros de la sociedad civil. El exalcalde Jean-Paul Alduy, que gobernó la ciudad entre 1993 y 2009, será nombrado presidente de honor. Jaume Roure, que fue teniente de alcalde de Cultura Catalana bajo el gobierno de Alduy, será el portavoz de la asociación y ha explicado que se dará a conocer el nombre el próximo 22 de abril.
Defender la catalanidad de Perpinyà a pesar de su alcalde
"Perpinyà es tierra catalana desde hace más de 1.000 años, estés a favor o en contra, es catalana", ha aseverado Roure en declaraciones en L'Indépendant, y ha explicado que el objetivo de esta acción es advertir a Alliot que "no toque la Fidelíssima", un sobrenombre de la ciudad rosellonesa que lleva implícita su esencia catalana. El título de Fidelíssima fue otorgado por el rey Juan II de Aragón en 1475 como reconocimiento a la voluntad de la población de Perpinyà de permanecer catalana, dado que resistió un asedio de ocho meses de los franceses. Así pues, este título recuerda la fidelidad de esta ciudad a Catalunya a pesar de las dificultades.
Esta catalanidad se encuentra en un momento difícil, después de que en julio del 2020 Louis Alliot, de Reagrupamiento Nacional, se convirtiera en alcalde de la ciudad después de derrotar en la segunda vuelta de las elecciones municipales al candidato de Los Republicanos. Alliot no rechaza de pleno la catalanidad y antes de convertirse en alcalde se comprometió a defenderla en todo aquello relacionado con el patrimonio cultural, pero, con todo, considera que tiene que prevalecer la identidad francesa. En este sentido, el medio citado le ha preguntado si es "alérgico al catalán" y qué piensa de las denuncias de esta nueva asociación. "Me emocionan la Estaca o Els Segadors, pero no pasan por delante de la Marsellesa", ha afirmado a L'Indépendant.
Desde que llegó al ayuntamiento ha provocado varias polémicas y las entidades en defensa del catalán en la región lo han acusado de intentar "borrar la catalanidad" de Perpinyà. Una de las acciones más destacadas fue el cambio del lema y el escudo de la ciudad, porque donde antes decía "Perpinyà la catalana", Aliot impuso "Perpinyà la radiante", al considerar que el primer lema era "reduccionista". El nuevo escudo muestra a San Juan Bautista, patrón de la ciudad, con las cuatro barras detrás y un estallido de luz que simboliza la Llama del Canigó, pero además, se ha añadido un borde con los colores de la bandera francesa. "Nadie cuestiona la identidad catalana de Perpinyà, pero el nombre de Perpinyà la catalana solo era un proyecto político", ha justificado Alliot, y ha insistido en que su objetivo es "devolver a Perpinyà su dimensión rosellonesa, catalana, pero también francesa."
Otro momento conflictivo se produjo cuando el Ayuntamiento de Perpinyà bloqueó el proyecto de La Bressola de construir un colegio-liceo en el monasterio de Santa Clara del Vernet. En septiembre del 2021 la asociación anunció que abriría su primer centro para alumnos de 15 a 18 años en Perpinyà, ya que hasta entonces no existía ningún liceo para los adolescentes de hasta 18 años en catalán. En un principio tenían que estudiar trescientos jóvenes y tenía que suponer un gran paso adelante para la inmersión lingüística en el territorio de la Catalunya Norte.
La Bressola ya había iniciado los trámites para adquirir el edificio histórico, pero en el último momento el Ayuntamiento se interesó en el edificio y ejerció el derecho de retracto que impidió sacar adelante el proyecto. Ante de este escenario, la entidad decidió presentar dos recursos contra el consistorio y la justicia le dio la razón. El pasado mes de diciembre confirmó que finalmente había comprado el monasterio y pidió al Ayuntamiento que permita hacer efectivo el proyecto del colegio-liceo.