Ciudadanos no cambia de estrategia a pesar del batacazo electoral y, una vez más, tiene previsto denunciar ante de la Fiscalía un miembro del Govern. En este caso se trata del conseller de Interior, Miquel Sàmper, a quien la formación naranja quiere denunciar por presunta prevaricación al considerar que la Generalitat se inhibe en la defensa de los agentes de los Mossos d'Esquadra agredidos en protestas como las que han tenido lugar esta semana a raíz del encarcelamiento del rapero Pablo Hasél.
El secretario de Comunicación de Cs en Catalunya y diputado electo en el Parlament desde el domingo, Nacho Martín Blanco, ha anunciado esta iniciativa ante la sede del Departament de Interior, escenario ayer jueves de las protestas. Blanco ha manifestado que la Generalitat está "desatendiendo" a los agentes y ha criticado que se hayan retirado acusaciones contra manifestantes en casos en que no había una agresión física a un agente. Esta inacción, a la opinión del diputado electo de Ciudadanos, puede ser constitutiva de delito, ya que "está dejando a la intemperie" los Mossos, sostiene.
"Extrema violencia contra los Mossos"
El anuncio de la denuncia llega al día siguiente que esta formación pidiera la dimisión del conseller de Interior. Blanco ha considerado "inadmisible" que la máxima preocupación del Govern ante las "imágenes de extrema violencia contra los Mossos" sea "tener contentos los extremistas de la CUP y cargar contra los Mossos d'Esquadra por su actuación contra la violencia extrema". El diputado electo ha acusado el ejecutivo catalán de defender a los violentos en lugar de ponerse al lado de los agentes.
Ciudadanos de suma así a la polémica abierta sobre la actuación de los Mossos d'Esquadra a las últimas protestas, todo y que el debate bien de lejos. Precisamente, el conseller Sàmper ha instado a hacer un debate y una revisión "de manera inaplazable y urgente del modelo de orden público" de los Mossos. Entre el colectivo policial hay malestar por las voces que ponen en cuestión su profesionalidad, por las condiciones de trabajo y, ahora, para ser materia de negociación para hacer gobierno. Ante este panorama hay quien apunta, entre los sindicatos policiales, a la posibilidad de llevar a cabo una huelga encubierta.