Como es habitual a lo largo de los últimos años, los partidos no independentistas ponen pegas a las iniciativas parlamentarias relacionadas con el procés que impulsan JxCat, ERC y la CUP. Horas antes de la votación de las propuestas de resolución del Debate de Política General, Ciudadanos y el PSC han pedido a la Mesa que anule varios puntos de los documentos que han presentado los grupos independentistas.
El apartado que ha levantado más polvareda es aquel donde la CUP hace referencia a ratificar la declaración de soberanía anulada por el Tribunal Constitucional que la cámara aprobó al inicio de la legislatura pasada, en el año 2016, días antes del paso al lado de Artur Mas. El PSC pide que se excluya del redactado esta parte, que también afirma la legitimidad de la desobediencia civil. Asimismo, también solicita que se borre el párrafo donde se expresa que Catalunya ejerció su derecho a la autodeterminación el 1-O de 2017.
En el caso de Ciutadans, el redactado de la impugnación entrado a la Mesa es más servero e incluso advierte de posibles responsabilidades penales de los integrantes de este órgano si permiten que se tramiten las propuestas que explicitan cómo tendría que ser la respuesta a la sentencia. Además de pedir que se bloquee la de la CUP que plantea un "gran acuerdo político por la amnistía, la autodeterminación y la defensa de los derechos fundamentales" tampoco aceptan que se admita la de JxCat, ERC y la CUP que rechaza el juicio al procés, plantea la amnistía y llama a la movilización como reacción a una eventual condena del Supremo a los líderes independentistas.
Desde el grupo que encabeza Lorena Roldán insisten en que el derecho a la autodeterminación no existe y se exclaman por la gravedad que a su juicio supone que la Mesa del PArlament acepte propuestaas que vulneran la Constitución.