Cuatro exalcaldes de Ripoll han cargado contra el actual gobierno municipal de Sílvia Orriols y contra su partido, Aliança Catalana, que tildan de "autoritario, represivo y sectario". Así se han expresado Pere Jordi Piella, Jaume Camps, Teresa Jordà y Jordi Munell en un manifiesto que han entregado este viernes al consistorio. Un texto en el que denuncian la "violencia institucional" que el gobierno de Orriols ejercería, dicen, con una "pérdida de derechos" que comparan con la del franquismo. Los cuatro exalcaldes han leído el texto este mediodía en un acto en Ripoll con 'L'estaca' de Lluís Llach de fondo.
Pere Jordi Piella, quien gobernó Ripoll desde las primeras municipales de 1979 hasta 1993 de la mano del PSC, se ha referido a las multas que la policía local habría interpuesto a varios ciudadanos por colgar carteles críticos o para manifestarse sin haber pedido permiso. "El 1-O en Catalunya nos pegaron con porras porque no querían que nos manifestáramos; aquí en Ripoll nos pegan con multas. Es lo mismo, allí era una violencia física y aquí es violencia institucional". "No es cierto que los ciudadanos tengamos que pedir permiso para manifestarnos, es un derecho constitucional que tenemos y lo tenemos que utilizar", ha dicho.
El exalcalde socialista ha hecho un llamamiento a manifestarse para denunciar lo que consideran un "recorte de derechos" y una manera de hacer "autoritaria": "Pediríamos a la alcaldesa, que es la persona que nos tiene que proteger y no un sheriff, que mire por el bien de todo el mundo y no por sus manías y fobias". A los partidos de la oposición los ha pedido "unidad" y "cerrar filas" para hacer valer el 70% de los votos que concentran y utilizarlos "con cabeza", ante un gobierno de Orriols en minoría. El exalcalde también ha dado un aviso a todos los catalanes: ha definido Aliança Catalana como "un cáncer" que cortará la libertad de expresión y la libertad si se la deja entrar a los municipios. Después de definir el partido como "autoritario y represivo", ha valorado que "una sociedad cerrada como la que nos queremos imponer aquí en Ripoll no tiene ningún futuro".
Para el exalcalde Jordi Munell, que gobernó del 2011 al 2023 y actualmente es diputado de Junts, Orriols "está reprimiendo solo en una dirección, el lado que critica la acción de gobierno y la alcaldesa". Munell ha advertido de los "peligros" de la censura y ha explicado que se puede dar el caso de que haya artistas que se autocensuren por miedo que les veten el dibujo del cartel de la Fiesta Mayor, como pasó el año pasado. O que haya niños "que tengan miedo de lo que escriben", con referencia a la exposición de un instituto vetada por Sílvia Orriols porque aparecían dos chicas con velo. "Y eso es miedo, el miedo a que durante muchos años se combatió contra la dictadura y eso vuelve a pasar en Ripoll en el siglo XXI".

Teresa Jordà, exalcaldesa (2003-2011) y ahora diputada de Esquerra Republicana en el Congreso, y Jaume Camps (alcalde del PSC entre 1993 y 1995), han pedido a los ripollencs rebelarse. Este último ha recordado los "años de lucha desde 1979 para sacar adelante ayuntamientos democráticos" y ha lamentado que ahora, todo eso se vuelva a tambalear. "La censura es la peor manía que puede haber en democracia", ha subrayado. Por su parte, Jordà también ha querido precisar que se ha escogido esta hora, al mediodía, porque era la lectura de un manifiesto. "Si hubiéramos querido a mucha gente, lo habríamos hecho en otro formato o en otra hora, no va de eso". "Va de decir al pueblo de Ripoll y a toda Catalunya que Aliança Catalana es la represión y el miedo", ha dicho en declaraciones a la prensa.
Orriols, presente
La alcaldesa Sílvia Orriols ha seguido todo lo que pasaba desde la misma plaza del Ayuntamiento, acompañada de dos concejales. Se ha mantenido en su sitio, en las escaleras para acceder a la plaza, sin moverse, mientras los exalcaldes han tenido que pasar por su lado para entrar al Ayuntamiento. Acto seguido, han registrado el manifiesto con la idea de que se apruebe en el pleno municipal. Entre los asistentes, había concejales del PSC, ERC y la CUP de Ripoll. Los partidos de la oposición intentaron en febrero una moción de censura para echar a Orriols del gobierno municipal, si bien no salió adelante por la falta de entendimiento entre los partidos de diferente signo político. Junts se sumó en un primer momento y se desdijo después alegando que era "inviable" y que si se hiciera aumentaría el "victimismo" que utiliza Aliança Catalana como herramienta política. Lo cual levantó a las críticas del PSC, ERC y la CUP. Orriols lo tildó de intento de golpe de estar y afianzó su intención de presentarse a las municipales del 2027 para revalidar la alcaldía.