Nuevo llamamiento de Jordi Cuixart al acuerdo entre partidos independentistas en plena disputa por las negociaciones del futuro Govern. Después de la aplaudida advertencia que ya hizo ayer el presidente de Òmnium Cultural, este jueves ha vuelto a pedir "máxima responsabilidad, generosidad y sentido de Estado" a las formaciones y ha avisado de que el país "se nos está fundiendo entre los dedos". Sin embargo, ha asegurado que "estamos más cerca de llegar a consensos de lo que algunos aparentemente quieren hacer creer" y ha confiado en que no se repetirán elecciones.
"Sería una negligencia repetir elecciones. Confío en que sabrán escuchar la voz de la ciudadanía porque el resultado es clarísimo. Este capital se tiene que saber gestionar", ha indicado. En este sentido, ha apuntado a la represión del Estado como causante de las diferencias y problemas entre las fuerzas independentistas. Ante eso, ha apostado por "reorientar la estrategia ante un Estado que ahora sabemos que está dispuesto a todo y trabajar con perseverancia para volver a tejer complicidades con toda la sociedad civil". "Lo tenemos que volver a hacer juntos", ha clamado.
El Consell per la República
Con respecto al principal escollo entre las negociaciones ERC-Junts, el papel del Consell per la República, el presidente de Òmnium Cultural se ha mostrado partidario de fijar primero la estrategia en común y después decidir cómo ejecutarla. "Los instrumentos sólo son útiles si son reconocidos por todas las partes. Primero concretamos las estrategias y después ya crearemos los espacios. No nos preocupa el donde, sino para qué", ha explicado. De esta manera, Cuixart ha instado a las formaciones y ha interpelado al conjunto del soberanismo para apostar por una hoja de ruta clara.
"Somos hermanos"
Después de 3 años y siete meses en la prisión, Cuixart ha reiterado que su prioridad en este momento no son ni los indultos ni salir. Para él, el objetivo pasa por solucionar el conflicto político en Catalunya y asegura que no piensa pedir perdón por haber ejercido unos derechos fundamentales.
El presidente de Òmnium sólo ha tenido muy buenas palabras para el resto de presos políticos que lo acompañan en Lledoners y les ha calificado de "más que hermanos". Dentro de la prisión somos más que hermanos, somos compañeros de trinchera. Somos como familia. Llevo más tiempo conviviendo con ellos que con mis hijos. Les tengo amor infinito", ha declarado.