Òmnium Cultural ha presentado este sábado en el fossar de Santa Eulàlia su campaña de cara al juicio del 1-O contra los presos políticos y líderes independentistas después del referéndum de independencia. El encargado de empezar el acto ha sido el cantautor Lluís Llach, que ha leído una carta del presidente de la entidad, Jordi Cuixart, encarcelado desde hace 460 días.

En su carta, Cuixart, ha recordado que los presos no son "la representación de ninguna derrota", sino todo lo contrario, "el paso útil hacia la victoria". El líder de Òmnium ha añadido que el mejor altavoz posible por la lucha hacia la independencia i la autodeterminación es, precisamente, el juicio en Madrid.

 

La voz de una sociedad

En su carta, Cuixart también afirma que será "la voz de una sociedad que nunca renunciará a la libertad" y hace una defensa enconada de la desobediencia civil en momentos de vulneración de derechos fundamentales en nombre de "la indisoluble unidad de España". 

Cuixart no se ha quedado aquí, y ha insistido en que su objetivo "no es salir de la prisión", sino que el conflicto político en Catalunya se resuelva, y ha invitado a todos los catalanes a "luchar juntos por la libertad".

Una campaña por toda Europa

El acto de Òmnium también ha servido para presentar las acciones que llevará a cabo la entidad para denunciar que este será un "juicio a la democracia". En la que será la campaña más ambiciosa de la historia de Òmnium, Xavier Antich i Marina Llansana han anunciado una serie de movilizaciones ciudadanas por toda Europa para denunciar la vulneración de derechos fundamentales que supone la celebración del juicio. La entidad celebrará manifestaciones ante la Comisión Europea, la sede de la ONU en Ginebra y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.

Aparte de estas movilizaciones por toda Europa, Òmnium también ha anunciado más mil actos por toda Catalunya para desmontar el juicio con juristas expertos, acciones de apoyo a todos los familiares de los presos políticos, exiliados y encausados por el caso del 1-O, una gran campaña de comunicación y marketing en la calle y, por último, un diario mensual para explicar qué sucede día a día en el juicio contra los presos políticos y evitar así "que se imponga el relato desde los diarios del Ibex-35".