Todo apunta que la CUP y Aliança Catalana (AC) compartirán el grupo mixto en el Parlament de Catalunya en esta XV legislatura, después de que se hayan constituido ya el resto de grupos parlamentarios y ninguno de ellos le haya cedido un escaño en los cupaires para poder tener grupo propio. La constitución de los grupos parlamentarios será ratificada el martes que viene por la Mesa del Parlament y los anticapitalistas intentarán hasta a última hora buscar la fórmula para no tener que compartir tiempo de intervención con los de Sílvia Orriols, con quienes están en las antípodas ideológicas en material social y económica, si bien será complicado porque el reglamento de la cámara catalana no es tan flexible para la cesión de escaños como lo es el Congreso de los Diputados, donde es una práctica común.

La CUP ha intentado negociar con ERC, Junts y los comunes para que les cedieran un diputado. De hecho, la diputada de la CUP Laure Vega ha asegurado este viernes en declaraciones en Europa Press que siguen "en conversaciones para no tener que compartir grupo mixto". Aun así, si finalmente no hay sorpresas, la CUP y AC compartirán el grupo mixto, aunque los cupaires podrán formar a un subgrupo al tener más de 3 escaños. Estando en el grupo mixto, las dos formaciones tendrán que compartir tiempo de intervención —el mismo que el resto de grupos, pero a repartir entre dos—, así como la capacidad para presentar iniciativas legislativas durante. También recibirán menos recursos económicos que si tuvieran grupo propio.

La formación anticapitalista sufrió un bajón electoral, siguiendo la estela de los últimos comicios, y pasó de 9 a 4 escaños en las últimas elecciones catalanas. Por su parte, Aliança entró por primera vez en el Parlamento de Catalunya y lo hizo con dos diputados. Se necesitan 5 para formar grupo propio, de forma que si algún otro partido deja un escaño a la CUP podrían hacerlo. El PSOE y Sumar lo hicieron con ERC y Junts para que el independentismo catalán tuviera al Congreso de los Diputados, donde es una práctica común. En el Parlament, sin embargo, el reglamento es más estricto y establece que si se da el caso este diputado cedido se tendría que quedar toda la legislatura en el nuevo grupo parlamentario o quedar como no adscrito.

Silvia Orriols y Ramon Abad, parlamentarios de Aliança Catalana / Montse Giralt

La líder de Aliança Catalana y alcaldesa de Ripoll, Sílvia Orriols, ya ha reaccionado a la noticia con un irónico mensaje en redes sociales: "No pongas esa cara, Laia [Estrado, actual líder de la CUP en el Parlament]... Nos lo pasaremos bien", ha afirmado en un tuit en 'X' acompañada con emojis de palomitas y carcajadas. La portavoz cupaire Laure Vega, por su parte, ha replicado hoy a Orriols: "No nos lo pasamos bien al lado de quienes al final hacen lo que hace toda la extrema derecha, independientemente de la lengua, de la bandera con la que se quieran tapar, que es hacer de pijos". Vega ha criticado que estos partidos, cuando hay problemas en ámbitos como la educación y la sanidad, "en lugar de denunciar eso tiran la culpa al vecino del lado". Laia Estrada aseguró ya el martes en rueda de prensa que "les incomoda profundamente compartir grupo mixto con una formación fascista".