Solo dos formaciones han votado contra el Quart Cinturó este jueves en el Parlament: la CUP y los comunes. Y los primeros han querido enviar un mensaje a los segundos: tienen que "repensar" su apoyo a los presupuestos de Pere Aragonès. Así lo ha pedido la diputada anticapitalista Montse Vinyets esta tarde, durante la sesión plenaria. También ha reclamado a la formación de Jéssica Albiach que dé apoyo a la petición de comparecencia urgente del conseller de Territori, Juli Fernández, que registrarán en las próximas horas. A pesar de la aprobación de la moción, los comunes ya han dejado claro que no peligra el acuerdo que firmaron con el Govern antes de las vacaciones de Navidad.
En rueda de prensa en el Parlament este jueves por la tarde, Montse Vinyets ha denunciado que el proyecto de presupuestos de la Generalitat "refleja el modelo de país que quiere impulsar el Gobierno, un modelo de más carreteras y más contaminación en un contexto innegable de crisis climática y energética". En este sentido, la diputada anticapitalista ha rebatido Aragonès: "Ponía encima de la mesa una disyuntiva, si íbamos hacia adelante o hacia atrás. Apostar por casinos, carreteras y el monocultivo del turismo es ir atrás". Vinyets ha acusado a Aragonès de hacer unas cuentas "hechas a medida por el Estado y por Foment".
Por todo eso, la CUP registrará la petición de comparecencia urgente del conseller de Territori, Juli Fernández, para que "aclare los motivos reales" de esta decisión "después de tantos años de oposición". Una petición que esperan que cuente con el apoyo de los comunes, a quienes también han exigido "repensar su apoyo a los presupuestos". Los anticapitalistas también se han ratificado en su decisión de no sentarse con el Govern para hablar de presupuestos. "La CUP no se ha excluido; se ha excluido ERC por no defender los intereses de la mayoría de la población", ha asegurado la diputada Laia Estrada.
La "contradicción" de Aragonès
El Govern se ha tenido que tragar un sapo para sacar adelante las conversaciones con el PSC por los presupuestos y no lo esconde. El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha admitido que ha tenido que aceptar una infraestructura, como es la B-40, que no forma parte de su modelo de país y que representa una contradicción y desgaste político. Una vez ha deglutido el Quart Cinturó, el president ha emplazado al PSC a apoyar las cuentas del Govern. "Ahora es el momento de que todo el mundo esté a la altura, que sea realista y claro. Es hora de hacer posible la aprobación del presupuesto de Catalunya para 2023", ha remachado.
Tras rechazar la enmienda propuesta por ERC, la moción que se ha aprobado compromete al Govern a "hacer efectivo, dentro del primer trimestre de 2023, con el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, el convenio de acuerdo y financiación que garantice la redacción del proyecto de la ronda Nord de los sistemas urbanos de Terrassa, Sabadell y Castellar (...) y la ejecución de las obras por parte del Govern de la Generalitat de Catalunya". La votación ha prosperado con el voto de todos los grupos, excepto la CUP y los comuns, que han votado en contra. Es decir, aunque ERC no hubiera votado a favor, se habría aprobado.