Después de seis reuniones con el Govern por los presupuestos, días más tarde que el Ejecutivo anunciara un acuerdo con el PSC por las cuentas catalanas, la CUP anunció que descartaba poder llegar a un acuerdo con los de Aragonès y que daba por acabada la negociación. Ya entonces anunciaron que debatirían con la militancia si se tenía que presentar una enmienda a la totalidad de los presupuestos y finalmente la Coordinadora de Organización Parlamentaria (de la cual forman parte las organizaciones que integran la candidatura) lo ha validado por unanimidad, tal como ha anunciado la diputada Mar Ampurdanés en rueda de prensa.
Con los cupaires fuera de la ecuación, el Govern tiene que conseguir el apoyo de Junts o los comunes para sacar adelante las cuentas en el Parlament, donde ya han empezado la tramitación y Ampuradanés ha asegurado que el partido "seguirá trabajando con los de Jéssica Albiach para "poder emplazarlos a que se sumen a la oposición a los presupuestos" de Aragonès. Tal como ha detallado la diputada, y ya se había visto durante los plenos del Parlament, la CUP "había emplazado en los comunes a trabajar juntos, porque sabemos que tenemos muchos puntos de encuentro". Entre estos destaca la oposición al Hard Rock, que desde En Comú Podem ya han advertido que es una línea roja y hasta que el Govern no retroceda no entrarán a negociar las cuentas. Ampurdanés ha sido muy crítica con el Ejecutivo de Aragonès, a quien ha reprochado haber perdido la oportunidad de aprovechar el último tramo de legislatura para hacer políticas de izquierdas.
Clientelismo en el pacto
La cupaire ha ido más allá y ha criticado que en el texto del pacto firmado por Pere Aragonès y Salvador Illa el pasado martes se vea muy claramente reflejado el "clientelismo" del PSC: "Todas las propuestas concretas que recoge el acuerdo benefician municipios donde gobiernan a los socialistas, lejos de tener una mirada de país," ha lamentado Ampurdanés, censurando también que, favoreciendo estas inversiones, "se refuerza la idea de un intercambio de cromos" entre instituciones. Más allá de esta denuncia, la diputada de la CUP en el Parlament también ha pedido a Aragonès que sea "claro" a la hora de expresar su opinión sobre proyectos como el mismo Hard Rock, la ampliación del aeropuerto o la B-40: "Es muy importante que el Govern sea transparente y explique sus planes para este tipo de infraestructuras", ha señalado.