La CUP ha trasladado al presidente del Parlament, Roger Torrent, la necesidad de "trabajar por una estrategia anti-represiva amplía y unitaria" y "hacer frente a la ofensiva represiva del Estado contra nuestro pueblo". Los anticapitalistas así se lo han expresado en una reunión que se enmarca en la ronda de consultas que el presidente de la cámara hace para explorar la posibilidad que haya algún nuevo candidato.
Los cupaires han denunciado que "nuevamente los tribunales españoles decidirán la fecha de las elecciones autonómicas en el principado de Catalunya" y que "la intromisión de los aparatos del Estado ha sido una dinámica que ha marcado la XII legislatura en el Parlament de Catalunya". "Una legislatura que inició con la convocatoria anticipada de las elecciones del 21 de diciembre de 2017 con la aplicación del 155 y que culmina con la inhabilitación del actual president de la Generalitat", han recordado.
La formación también ha reiterado que "la solución democrática al conflicto político pasa por el reconocimiento del derecho al autodeterminación, la amninista de las 3.000 personas represaliadas, el libre retorno de las personas exiliadas y la plena garantía de los derechos sociales, civiles y políticos". En este sentido, han reivindicado que el Govern tiene que retirar "de forma inmediata las acusaciones" contra manifestantes independentistas encausados por acciones llevadas a cabo en protestas en la calle.
La CUP también se compromete a hacer propuestas "que busquen soluciones" a la crisis sanitaria, económica y social que ha provocado la pandemia de la Covid-19, a fiscalizar las políticas del Govern en funciones y a "trabajar en la mejor candidatura y propuesta política basada en un programa de independencia nacional, de rescate social, de emergencia ecológica y de soberanía popular que ocurra una alternativa a los tres últimos años y recupere la credibilidad perdida del proyecto independentista con una agenda de ruptura con el Régimen del 78".
Ningún candidato
Como es evidente, los cupaires han descartado presentar a ningún candidato (cosa que ya estaba confirmada por parte de las tres fuerzas independentistas en la cámara). En todo caso, han avisado de que "no entenderíamos que se propusiera ningún candidato alternativo a la presidencia por ninguna de las fuerzas democráticas con representación hoy en el Parlament".