El presidente del PDeCAT, David Bonvehí, ha reivindicado el legado y la historia de su partido ante la Crida Nacional per la República, a la que emplaza a precisar si quieren ser el "relevo" de su formación en el marco de la reordenación del espacio de JxCat.
"Si la Crida quiere ser el relevo del PDeCAT o quiere representar lo que representaba el PDeCAT, que se diga, pero creo que el espíritu fundacional de la Crida era otra cosa", ha recalcado en una entrevista de Europa Press.
Para Bonvehí, no es coherente que la Crida, impulsada por el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, pida la disolución del PDeCAT y no del resto de partidos independentistas, y recuerda que nació como un movimiento que quería agrupar a todo el independentismo.
Aunque coincide con Puigdemont en que la unidad del independentismo sería el marco ideal, constata que no ha sido posible y que ahora el PDeCAT, a la espera de que culmine el proceso de reflexión que abrieron en julio, debe decidir cómo evoluciona en la futura reordenación de este espacio.
"No me gusta que todos hablen del PDeCAT, hemos sido muy generosos", ha defendido Bonvehí, que ha pedido a todos los actores de JxCat definir y acordar unos mínimos para avanzar hacia la unidad que todos proclaman.
"Definir unos mínimos"
"Deberíamos intentar ver si somos capaces de definir unos mínimos y, a partir de allí, que todos acepten estos mínimos y hacer un gran partido con muchos matices. Si no se pactan los mínimos en los que todos se sientan cómodos, esta unidad, por mucho que hablemos de ello, no será posible", ha advertido.
También ha subrayado que no pueden apelar a la unidad de todo el independentismo si no son capaces, como proyecto político, de definir estos mínimos que reclama, y avisa del riesgo de caer "en debates reduccionistas que no llevan a ningún sitio y evidencian falta de unidad", al preguntársele sobre si hay que apostar o no por la unilateralidad.
Sobre si mantiene que la reordenación de JxCat tendría que ser parecida a la CDC de los primeros años, Bonvehí ha explicado que le gustaría que el espíritu que representaba Convergència quede reflejado en su seno y los que les votaban puedan sentirse cómodos.
"No digo que no puedan sentirse cómodos, puede que sí. A lo mejor llegamos a la conclusión de que toca hacer algo 100% diferente, pero me da la sensación de que no estamos aquí", ha apuntado.
Así, le gustaría que miembros críticos del PDeCAT como Marta Pascal y Carles Campuzano siguieran formando parte del partido, y por ello se reunirá con ambos en las próximas semanas tras saber que acudirán, junto con representantes de otras formaciones contrarias a la unilateralidad, a una reunión el sábado 21 de septiembre en el Monestir de Poblet para debatir sobre el futuro de Catalunya.
"Siempre he pedido a los asociados del PDeCAT que tenemos que hacer un esfuerzo para mantenernos unidos dentro del mismo partido. El PDeCAT puede representar los diferentes matices que hay dentro del independentismo, pero cada uno es libre de tomar sus decisiones", ha destacado.
Puigdemont, Mas i alcaldes
Para Bonvehí, Puigdemont es el "líder indiscutible" del espacio de JxCat y debe decidir qué papel quiere jugar, y considera básico que también esté el expresidente de la Generalitat Artur Mas.
Sin querer precisar, cree que los alcaldes del PDeCAT también deberán tener presencia en esta reordenación, y ha llamado a no convertir este proceso "en una batalla de nombres".