Innovación al poder. Como ya pasó con el acto de toma de posesión, el equipo de Pere Aragonès ha querido innovar en otro de los clásicos, el retrato oficial del president del Govern, el que se envía a ayuntamientos, organismos oficiales e instituciones y equipamientos públicos. Por primera vez se ha hecho fuera del Palau de la Generalitat, a pie de calle.
Según se informa desde Presidencia, el objetivo es "buscar una estética diferenciada de los fondos cromáticos o de espacios institucionales". El escenario escogido es el exterior del jardín de infancia Dolors Canals, en el barrio de Sant Martí. La autora es la fotógrafa Laia Abril, una artista barcelonesa. El gobierno catalán resalta que Abril trabaja "con fotografía, texto y sonido, en proyectos basados en largas investigaciones sobre realidades ocultas e incómodas en torno al luto, la biopolítica y los derechos de la mujer."
El retrato, explica el ejecutivo en un comunicado, pretende captar "de forma muy directa y lo más natural posible, sin grandes pretensiones, buscando una expresión próxima y relajada", al president. Aparte de la imagen principal que se distribuirá en los espacios institucionales, hay dos más hechas en el Palau de la Generalitat. Una en el Pati dels Tarongers y la otra ante la obra de Tàpies en la sala donde se reúne el Govern.
La promesa electoral
La escuela escogida para ser el fondo del retrato es el jardín de infancia Dolors Canals, en la Gran Via de les Corts Catalanes. Canals fue una médico, bióloga y pedagoga que entre 1936 y 1939 impulsó las guarderías de guerra. Precisamente uno de los compromisos que durante la campaña electoral anunció ERC es que los jardines de infancia, la enseñanza entre los 0 y 3 años, pasen a ser gratuitos.
La autora del retrato
Después de licenciarse en Periodismo y estudiar fotografía en Nueva York, Laia Abril entró en el 2009 en la residencia de creación de Benetton en Italia, donde trabajó durante 5 años como editora y fotógrafa en la revista Colors Magazine.
Su obra se ha expuesto en más de 15 países y forma parte de colecciones privadas y públicas como la del Centro Pompidou y el FRAC, en Francia; el Musée de l'Elysée y el Fotomuseum Winterthur, en Suiza, o la del Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC), en Barcelona. Sus proyectos han sido secundados por la Magnum Foundation (Nueva York, 2019), el Visionary Award (Londres, 2018), o el FotoPress (Barcelona, 2016), y su carrera ha sido reconocida, entre otros, con el Prix de la Photo Madame Figaro (Arles, 2016), The Hood Medal (Londres, 2019) y el FOAM Paul Huf Award (Amsterdam, 2020).