El gobierno español ha cerrado la delegación del Govern ante la Unión Europea hasta "nueva orden". Según ha podido saber la ACN, el Ministerio de Exteriores ha enviado un burofax ordenando a todos los trabajadores que se vayan a casa "hasta nueva orden", aunque más tarde ha explicado que tiene previsto reabrirla este jueves y justifican el cierre de la sede para "evitar posibles aglomeraciones" teniendo en cuenta que se había hecho una convocatoria "sin autorización ni información".
Según ha podido saber la ACN, el Ministerio de Asuntos Exteriores ha enviado un burofax ordenando a todos los trabajadores que se marchen hacia casa "hasta nueva orden". En el escrito, que ha llegado a la delegación a través de la embajada española en Bélgica, se acuerda de que la sede está bajo la "tutela" del gobierno español.
La delegación del Govern en Bruselas era la última que quedaba abierta fuera del Estado, aunque su último representante, Amadeu Altafaj, fue despedido a finales de octubre por la aplicación del artículo 155.
La orden llega coincidiendo con la prohibición de Madrid de celebrar en la sede de la delegación una reunión entre el presidente del Parlament, Roger Torrent, el president en funciones y líder de JuntsxCat Carles Puigdemont, y los diputados Clara Ponsatí, Lluís Puig, Meritxell Serret y Toni Comín.