"Nos están vigilando". Este es el contundente eslogan que ha escogido Òmnium Cultural para denunciar el espionaje a líderes independentistas catalanes descubierto por la revista The New Yorker. Los últimos presidentes de la Generalitat han sido objetivo de ciberespionaje, según el grupo de expertos en ciberseguridad Citizen Lab. La organización ha puesto al descubierto el nombre de 65 políticos y miembros de la sociedad civil catalana, la gran mayoría víctimas del programa Pegasus, diseñado por la israelí NSO para acceder a ordenadores y dispositivos móviles. Figuran Artur Mas, el entorno de Carles Puigdemont, Quim Torra y Pere Aragonès. También han sido objeto de ciberespionaje dirigentes de la ANC y Òmnium Cultural como Elisenda Paluzie, Jordi Sànchez o Marcel Mauri, además de una treintena de miembros de JxCat, ERC y la CUP. Citizen Lab apunta que hay "nexos" entre este espionaje y "unas o más entidades del Gobierno". Como respuesta a esta vulneración Òmnium Cultural ha compartido un vídeo que demuestra cómo se tiene que sentir una persona cuando está siendo observada en todo momento.
Las imágenes muestran a varias personas que están viviendo situaciones íntimas (ir al lavabo, mantener relaciones sexuales con la pareja, recibir malas noticias médicas...) pero que en todo momento están siendo observadas por uno tercero que invade su intimidad. En el vídeo también se pueden ver personas paseando por la calle en ropa interior, estas representan los diferentes colectivos que han sido espiados a través de Pegasus. "Nos están vigilando", subraya la entidad independentista al mismo tiempo que asegura que este es "el caso de ciberespionaje más grande nunca descubierto". Las imágenes aseguran que en total se han espiado 65 personas pero que hay miles de "colaterales" y que el culpable de todo es el estado español. Por todo eso piden que se destape el caso.
Antich dice que el Estado está "fuera de la ley
El presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, ha cargado contra el presunto espionaje a que se sometió a varios líderes independentistas catalanes gracias al software israelí Pegasus, que infecta los teléfonos móviles, y ha señalado el Estado español, al cual ha acusado de estar "fuera de la ley". "No nos quedaremos de brazos cruzados ante un escándalo intolerable en que amenaza derechos y libertades de todos" y que supone "el caso de ciberespionaje más grande contra un movimiento democrático", ha lamentado en Twitter.
Una investigación a gran escala
Después de los primeros informes publicados el año 2020, Citizen Lab ha concluido ahora una investigación a gran escala sobre los casos de ciberespionaje en el entorno independentista, que afecta a 65 personas de diferente rango político y de la sociedad civil. La mayoría, 61, han sido atacados con el programa Pegasus. Hay dos víctimas de otro programa similar, Candiru, y dos más han sido atacadas por los dos programas. Los primeros nombres que se hicieron públicos en el 2020 fueron los del entonces presidente del Parlament, Roger Torrent; el líder de ERC al Ayuntamiento de Barcelona, Ernest Maragall; la exdiputada de la CUP, Anna Gabriel; un miembro de la ANC, Jordi Domingo, y el director del Consell per la República, Sergi Miquel. La lista definitiva y la relevancia de los cargos que ahora se conoce, sin embargo, va mucho más allá. Todos los eurodiputados independentistas, por ejemplo, han sido objetivo del ciberespionaje, ya sea de manera directa, como Toni Comín, Diana Riba y Jordi Solé, o a través de amigos y familiares, como en el caso de Clara Ponsatí y Carles Puigdemont.