La hija del presidente de la sala segunda del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, ha conseguido una plaza como fiscal en un proceso sin precedentes que apunta a trato de favor, según ha denunciado eldiario.es. Sofía Machena Pereda ha conseguido la plaza 36 de una convocatoria de 35 plazas de fiscal y lo ha hecho mediante un procedimiento sospechoso de nepotismo.
La hija de Marchena aprobó el año 2016 la oposición común a las carreras fiscal y judicial con una nota de 68,20, optó por ser juez e ingresó en la Escuela Judicial, con sede en Barcelona. En aquel momento Sofía Marchena Pereda hubiera podido hacer carrera como fiscal ya que tenía nota suficiente para hacerlo. Hay que puntualizar que una vez has escogido una opción no puedes pasarte a la otra.
Acuerdo del CGPJ
Un mes después de ingresar en la Escuela Judicial, la hija de Marchena la abandonó por enfermedad, y no ha vuelto, una vez recuperada, tal como le permite la ley. Contrariamente, en diciembre del 2017 la Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) la suspendió como funcionaria en prácticas (estatus que tenía como alumna de la escuela) a causa de su enfermedad y la puso en situación de poder escoger nuevamente si quería ser juez o fiscal, a la vez que le conservó su nota (68,20) y sus derechos.
Esta es, explica el diario.es, una situación inaudita ya que, habitualmente, cuando un alumno de la Escuela Judicial abandona por enfermedad, se incorpora a la siguiente promoción.
El cambio de situación de la hija del magistrado se acordó en la Comisión Permanente del CGPJ a propuesta de la directora de la Escuela Judicial, Gema Espinosa, esposa del magistrado de la sala segunda del Supremo Pablo Llarena, sala que preside precisamente Manuel Marchena. Y el acuerdo se adoptó, sospechosamente, el 21 de diciembre, a pocos días de las vacaciones de Navidad, de modo que pudiera pasar desapercibido.
Plaza de fiscal
Gracias ha este acuerdo del CGPJ, la hija de Marchena ha conseguido una plaza de fiscal, la 36, en una convocatoria que inicialmente era de 35, tal como publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE) el miércoles 25 de julio. La nota con que ha conseguido la plaza no, es sin embargo, la que le reconoció el CGPJ en diciembre del 2017 (68,20). Se le asignó una inferior (52,31) para, según han indicado fuentes del CGPJ a eldiario.es, "no perjudicar a nadie".
El trato de favor que habría recibido a la hija del magistrado Manuel Marchena ha sido denunciado por varios juristas y políticos en las redes sociales.
Hoy, @elisabeni saca a la luz un caso sospechoso de trato de favor en la oposición para jueza o fiscal a la hija de un Presidente de Sala del Tribunal Supremo.
— Joaquín Urias (@jpurias) 26 de julio de 2018
Estas cosas, y otras que seguramente no salen a la luz, emanan tufillo mafioso y corporativo. https://t.co/1jnXj3kZtC
Esto pinta feo y lo que no se sabe es si es lo único que pasa a la altura del Supremo:
— Gonzalo Boye (@boye_g) 26 de julio de 2018
La hija de Marchena, por Elisa Beni @elisabeni https://t.co/8h5uhwwWqg vía @eldiarioes
Marchena és presumptament l’autor intel·lectual de tot el que fa Llarena i confirma la sala d’apel·lacions del Suprem. És el magistrat que ha d’escriure la sentència del judici contra l’independentisme. Aspira a presidir el Consell General del Poder Judicial a partir de desembre https://t.co/Jr10qJHj4k
— Josep Costa (@josepcosta) July 26, 2018
La Unión Progresista de Fiscales (UPF) ha reclamado al Consejo General del Poder Judicial toda la información y documentación referida a ala asignación de la plaza de fiscal a la hija del magistrado Manuel Marchena.