La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica ha presentado en el registro del Ministerio de Defensa una queja por como se explica en su página web la historia del Alcázar de Toledo, edificio en el que actualmente se encuentra el Museo del Ejército. En el escrito, esta asociación exige al Ministerio que dirige Margarita Robles que corrija "la versión franquista" de lo ocurrido en el Alcázar de Toledo durante la Guerra Civil cuando señala que "soportó un constante asedio durante 70 días que tuvo como resultado una nueva destrucción", una versión de la historia que la Asociación considera que "oculta y manipula" la realidad de manera sesgada en favor del relato de los sublevados franquistas. Además de la web de Defensa, el texto que ha suscitado la polémica está también en los trípticos en papel del museo.
"El Alcázar de Toledo no sufrió un asedio. Después del golpe de Estado de julio de 1936, los golpistas se atrincheraron en él, utilizando recursos públicos administrados por el Gobierno democrático de la Segunda República para asaltar el poder violentamente", asevera la asociación en un comunicado. La entidad precisa que lo que Defensa nombra como 'un asedio' "fue el intento por restablecer la legalidad e impedir que los golpistas utilizaran recursos públicos para poner fin al primer periodo democrático de la historia de España".
Tal como argumenta Emilio Silva, presidente de la asociación, "decir que el Alcázar de Toledo fue asediado por el Gobierno legal es como afirmar que los que en 1981 intentaron sacar al coronel [Antonio] Tejero del Congrés dels Diputats querían asaltar el Parlamento". Por eso, la asociación exige, en la petición que ha registrado, "que se acabe de utilizar la narrativa de la dictadura para contar la historia del Alcázar de Toledo, que se haga un relato democrático de lo mismo que denuncie a los militares golpistas y que se explique cómo fue utilizado por la dictadura para su propaganda o que fue visitada por personalidades del fascismo europeo, como Heinrich Himmler, jefe de la policía de Adolf Hitler, que lo visitó en octubre de 1940".
Un episodio destacado de la Guerra Civil
En concreto, el episodio al que hace referencia el texto de la polémica es una batalla ocurrida al principio de la Guerra Civil, entre el 21 de julio y el 27 de septiembre de 1936. Las fuerzas militares sublevadas de la guarnición de Toledo y los afines se atrincheraron en el Alcázar de Toledo, imponente edificio histórico símbolo de la ciudad, y las fuerzas leales a la legalidad republicana vigente, mayoritariamente milicianos del Frente Popular y guardias de asalto, asediaron el edificio para intentar recuperarlo durante 70 días. En septiembre, el asedio se rompió con la llegada de más fuerzas franquistas comandadas por el general José Enrique Varela. Solo tres días después, Francisco Franco sería nombrado 'Generalísimo' entre el resto de altos mandos militares sublevados contra la República.