Der Spiegel describe en una crónica el "fervor" de España para intentar extraditar al president Carles Puigdemont, que se ha puesto de manifiesto en varios frentes. El semanario alemán sitúa en ello la petición española de celebrar un encuentro de fiscales alemanes y españoles en La Haya, y también el registro ayer de la sede del Diplocat en Barcelona.

"Después de la derrota que sufrieron en Schleswig, los fiscales madrileños lo vuelven a intentar. Quieren presentar nuevas pruebas sobre Carles Puigdemont a sus homólogos alemanes", afirma Der Spiegel, que se pregunta si finalmente podrán llegar al president catalán.

Según el semanario, el registro del Diplocat se tiene que enmarcar en el intento de buscar cómo sea pruebas del delito de malversación, en gastos para el referéndum del 1 de octubre, que es lo único que queda ahora al Estado español para conseguir la extradición. "Quizás esta batida proporcione las pruebas que el poder judicial español necesita de forma desesperada", indica.

Recuerda que prácticamente a la misma hora que el registro se reunían a 1.200 kilómetros de distancia fiscales españoles y alemanes en La Haya. "Según los medios de comunicación madrileños, querían presentar material nuevo sobre Puigdemont a sus homólogos de Schleswig". "La señal está clara. El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena y los fiscales no se dan por vencidos. Intentan reavivar la acusación de rebelión después del bofetón que recibieron el jueves pasado".

Frank Meyer, profesor de Derecho Penal y Procedimiento Penal de la Universidad de Zurich, asegura que sobre el papel se podría volver a una petición de extradición por rebelión si se aportan novedades, porque no existe una decisión judicial definitiva. El catedrático de Derecho Penal de Berlín, Martin Heger, se muestra más prudente y considera que el Tribunal "no revocará fácilmente" su decisión de poner en libertad al president catalán y de excluir el delito de rebelión.

Der Spiegel opina que los fiscales españoles se tendrán que arremangar si quieren implicar a Puigdemont en actos de violencia, porque hasta ahora no lo han demostrado. "En primer lugar, faltan pruebas de la implicación de Puigdemont en actos de violencia en las manifestaciones independentistas del Otoño catalán. En segundo lugar, el Tribunal de Schleswig-Holstein considera que el alcance de la violencia es demasiado pequeño para extraditar a Puigdemont por alta traición, de acuerdo con la legislación alemana, o por rebelión, de acuerdo con la legislación española", subraya.

Según el semanario, la Justicia española puede estar ensayando un modelo de delitos a la carta, en función de los que acepte la Justicia alemana, con la finalidad prioritaria de conseguir la extradición de Puigdemont. Recuerda en este sentido que en Madrid también se habla ahora de una acusación de sedición, pero apunta que para eso sería necesario que Llarena emitiera una nueva euroorden.

"Todo depende de las pruebas que encuentren a los fiscales españoles. El jueves todavía estaban buscándolas con fervor", concluye.