Efectivos de los Mossos d'Esquadra han desalojado esta noche a empujones a los manifestantes independentistas que cortaban la Meridiana de Barcelona. El corte, que está prohibido por la conselleria d'Interior, ha durado unos minutos, y el desalojo ha provocado tensión con los concentrados. Ha sido el cuarto día consecutivo que los Mossos desplazan la protesta. No se han producido de todas formas enfrentamientos violentos, en lo que ha sido el 673 corte de esta vía de entrada en Barcelona en una protesta independentista. Hace 7 días que la conselleria d'Interior prohibió cortar la Meridiana, pero el colectivo Meridiana Resisteix y la Assemblea Nacional Catalana (ANC) han seguido desobedeciendo las órdenes gubernamentales. El conseller Joan Ignasi Elena ordenó cambiar la concentración independentista a la entrada de la ciudad ubicándola en una plaza de peatones próxima. Los dos primeros días pudieron superar el dispositivo policial de los Mossos d'Esquadra y consiguieron cortar la Meridiana durante más de una hora y media. El lunes, en cambio, los agentes antidisturbios de la policía catalana se reforzaron y neutralizaron el corte que había provocado a un grupo de unas 40 personas. El martes, que era el cuarto día que Meridiana Resisteix había convocado a pesar de la prohibición de Interior, la presencia de furgonetas antidisturbios no evitó que cerca de un centenar de manifestantes volvieran a cortar esta arteria principal de Barcelona, igual que el miércoles y jueves.
El fin de semana
Meridiana Resisteix ha convocado a manifestarse en este punto especialmente el sábado y domingo, y critican la decisión de la conselleria d'Interior de prohibir los cortes. Hablan de "la indignidad y la represión de un gobierno títere y en manos de un estado fascista y opresor". El sábado pasado fue el primer día que entraba en vigor la resolución de la Direcció General d'Administració de Seguretat que, por razones de orden público, obligaba a las personas que cada día se concentran en la Meridiana a hacerlo en la plaza de un el lateral de la avenida. Pero los convocantes no lo aceptan, y por el momento han seguido manifestándose cada día. Después de los días difíciles que tuvo la concentración en las fases más intensas de la pandemia de la covid, la prohibición parece haberla animado.