La manifestación de la Diada llega este año en un contexto excepcional: después de proclamar la independencia y con presos políticos y exiliados. Es por eso que, para este Once de Septiembre, la Assemblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural convocarán una gran manifestación para exigir la materialización de la República. El objetivo es llenar la avenida Diagonal de Barcelona. El lema será Fem la República Catalana.

Como en las grandes manifestaciones de los años anteriores, las entidades soberanistas pondrán en marcha un procedimiento de inscripción a través de internet. En esta ocasión, la camiseta oficial será de color coral, en homenaje al color de las bridas de las urnas del referéndum del 1-O. El recorrido de la manifestación será desde Palau Reial hasta la plaza de las Glòries.

En la camiseta aparece el perfil del Pedraforca, que representa, según los convocantes, la voluntad de "superar los obstáculos, llegar a la cumbre y plantar la bandera de la República Catalana.

Elisenda Romeu, coordinadora de movilización de la ANC, ha asegurado que esta Diada "queremos hacer patente que la fuerza de la gente nos llevará a superar los obstáculos y los muros que nos oprimen".

"La represión no nos puede hacer renunciar"

La presidenta de la Assemblea, Elisenda Paluzie, ha querido dejar claro que la manifestación es para pedir la materialización de la República Catalana. En este sentido, ha señalado que las protestas por la liberación de los presos políticos ya son continuas, y que no puede ser el principal objetivo de la Diada. "La represión política no puede tener como consecuencia que renunciamos a nuestros objetivos políticos", ha advertido. Ha insistido que la represión "nos hace ser todavía más conscientes de la necesidad de la independencia".

Paluzie ha hecho un llamamiento a movilizarse, porque "ha sido sobre todo la gente quien ha empujado para llegar hasta aquí". Ha apelado a la primera gran manifestación del 2012, que ha considerado que hizo cambiar la agenda política. "En 2012 dejamos de hablar de pactos fiscales para hablar de derecho a decidir, referéndum e independencia", ha sostenido la dirigente soberanista.

Por su parte, la vicepresidenta segunda de Òmnium, Marina Llansana, ha recordado que no es "un Once de Septiembre más", sino que "nos espera una Diada con presos políticos y unos exiliados". "Hace un año nos habría parecido impensable y nos habría puesto los pelos de punta", ha dicho Llansana. "Este 11-S es la movilización más importante, pero de aquí al 11-S hará falta que nos sigamos movilizando muy y muy a menudo". Ha subrayado la manifestación del 14 de julio en Barcelona por la liberación de los presos políticos.

Josep Maria Cervera, presidente de la AMI, ha querido apoyar a las entidades soberanistas. También ha destacado que las "circunstancias son diferentes" a los años anteriores. Es por eso que ha reclamado tener presentes a los presos y exiliados y la necesidad de "tirar adelante el proyecto que nos encargó la ciudadanía el 1-O".

Durante las próximas semanas se darán a conocer más detalles logísticos sobre la gran manifestación de la Diada, que esperan que sea multitudinaria.