No se podía saber. Los diarios de Madrid —los de Barcelona no se imprimen hoy, San Esteban— son una carga de caballería en defensa del real discurso de Navidad. Como ayer no salieron al quiosco, se ahorran en portada la glosa del texto, la pesada tarea de elaborar una interpretación que transforme el mismo discurso de siempre en cosa digna de un estadista. La gracia de los impresos madrileños es que aprovechan el discurso para dar ventaja a sus contradictorias maquinaciones. El discurso les sirve para una cosa y la contraria.

A la maniobra de las tres cabeceras de la derecha madrileña no le falta picardía. Cargan contra los que han malhablado del Rey (soberanistas de todo tipo) y hacen ver que le defienden. En realidad, aprovechan la ocasión para castigar de nuevo al PSOE a quien acusan de tolerar que sus compañeros de investidura, pérfidos y republicanos, engorden la anti-España, etcétera.

El País, en cambio, hace la misma maniobra... en sentido contrario: se pone al lado de Felipe VI para apuntalar el acuerdo entre el PSOE y Unidas Podemos con el argumento sensacional que "vinculan su pacto a los desafíos planteados por el Rey".

Es muy destacable el uso del concepto "desafíos" con que el diario progre pretende ennoblecer los topicazos que el real discurso señalaba como "serias preocupaciones": la nueva era tecnológica y digital, el cambio climático, el "rumbo de la Unión Europea", "la cohesión social", "el deterioro de la confianza en las instituciones", bla, bla, bla. Y Catalunya, claro. Nada que no se haya podido decir hace dos años o dentro de dos años. Nada que no forme parte de las vaguedades de cualquier acuerdo de gobierno entre cualesquiera partidos, españoles o del país que quieras. ¿Dicho de otra manera, hay alguien a quien no preocupe todo eso, sea de derechas o de izquierdas, unionista o indepe? Inquietarse por estos "desafíos" o "preocupaciones" no parece nada del otro mundo, vaya. Es de mínimos. En fin, al menos hay que reconocer a El País el esfuerzo de vestir la mona.

BOLA EXTRA. ¿Qué deben pensar las familias de los presos políticos y de los exiliados catalanes al ver la fotografía de Iñaki Urdangarín y Cristina de Borbón del brazo por Vitoria en las portadas de El Mundo y La Razón?