Los once diputados electos de Vox se han negado a firmar una declaración hecha por el Parlament contra el acoso y la discriminación. Así lo ha confirmado su líder en Catalunya, Ignacio Garriga, a través de un hilo de tuits.
La declaración de compromiso de tolerancia cero ante la discriminación y el acoso psicológico o sexual es una de las medidas del Plan de igualdad de género que se aprobó la pasada legislatura y que se aplicará por primera vez esta decimotercera legislatura.
El texto dice eso: "De acuerdo con los objetivos del Plan de igualdad de género del Parlament de Catalunya de hacer de la institución un referente en la lucha contra la desigualdad de género y la discriminación, me comprometo a velar por un entorno laboral libre de sexismo, LGBTI-fobia, acoso psicológico o acoso sexual". Cuando me sea requerido, cooperaré diligentemente en los procedimientos existentes para gestionar las denuncias o quejas en esta materia. Asimismo, me comprometo a participar en la formación especializada que imparta la cámara sobre igualdad de género y sobre prevención del acoso", añade.
¿Es obligatorio firmar esta declaración para ser diputado?
No. Los únicos dos requisitos para acceder a la condición de diputado son presentar al Registro General del Parlamento la credencial expedida por el órgano correspondiente de la Administración electoral y hacer la promesa o el juramento de respetar la Constitución española y el Estatuto de autonomía de Catalunya; y presentar una declaración de las actividades profesionales, laborales o empresariales que ejercen y de los cargos públicos que ocupan; y también una declaración de bienes, que tiene que detallar su patrimonio. Las dos declaraciones son públicas a través del Portal de Transparencia.
Las descalificaciones de Garriga
Garriga ha escrito todo un hilo de tuits para justificar su negativa y la de su grupo a firmar este compromiso. "Pretenden obligarnos a firmar una declaración aceptando recibir charlas sobre su perspectiva de género", ha apuntado el dirigente ultra.
Sin entrar a concretar qué no comparte de la declaración, Garriga califica el Plan de igualdad de género de "chiringuito pagado por todos los catalanes". También lo ha acusado "de imponer cuotas y victimizar a las diputadas". Con el fin de ridiculizar esta tarea parlamentaria, Garriga ha bromeado sobre que sus prioridades son "el uso de la copa menstrual" y "corregir el sesgo de género en las obras de arte". "No pueden estar más lejos de los intereses reales de los catalanes: son agencias de colocación y despilfarro político", ha lanzado.
Por último, el líder de Vox en Catalunya ha mezclado este tema con otros asegurando que no aceptarán ninguna lección de los que "agreden a diario a nuestros policías, muchos de ellos mujeres", en referencia a los disturbios vividos en protestas independentistas o antifascistas.
"Nuestro compromiso es con la igualdad de los españoles. De todos. Independientemente de su raza, sexo religión o condición. Por ejemplo, si hablan castellano o catalán en sus casas", ha concluido banalizando la desigualdad entre mujeres y hombres y el acoso que sufren determinados colectivos.
¿La primera de muchas?
Probablemente, los parlamentarios ultraespañolistas protagonizarán varios episodios como este en esta legislatura que empieza. Por este motivo, PSC, ERC, JxCat, CUP y En Comú Podem se han reunido hoy mismo para arrinconar a Vox en el Parlament y reducir al máximo su visibilidad.