Dos activistas han empezado una huelga de hambre por protestar contra la modificación de la Ley de Política Lingüística. Se trata de Carles Furriols y Jaume Sastre. El segundo ya hizo una huelga de hambre el año 2014 durante 41 días para protestar contra la política educativa del entonces presidente balear, José Ramon Bauzà, y reclamar un sistema educativo en catalán en las Islas Baleares. Ahora lo hará, junto con el otro activista, para protestar contra el acuerdo entre Esquerra Republicana, Junts per Catalunya, PSC y comunes para incluir el castellano como posible lengua vehicular en la escuela catalana. Este miércoles han anunciado que la protesta se alargará hasta el 28 de abril, día en que se preveía que el Parlamento votaría la modificación de la Ley de Política Lingüística. "Hay que pasar a la acción; la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya sobre el 25% ha sido la gota que ha colmado el vaso", ha señalado Jaume Sastre.
Ahora bien, este mismo miércoles Junts per Catalunya ha conseguido presionar los otros miembros del acuerdo para que la modificación no se vote en el próximo pleno de la cámara catalana, de manera que ahora está en el aire la nueva fecha para aprobarlo. La intención de JxCat es seguir negociando a fin de que la modificación cuente con más apoyo social. De todos modos, los huelguistas han informado de que mientras dure su protesta se alojarán en la Casa de la República de Vic, en la calle Jaume I el Conqueridor número 28 de la capital de Osona. Temen que la modificación de esta ley catalana pueda crear jurisprudencia en el País Valencià y en las Islas Baleares. Asimismo, han hecho un llamamiento a "desobedecer" y "plantar cara" a los jueces, a quienes acusan de ser los "culpables" del ataque a la lengua.
Los dos activistas esperan que durante los días que dure la huelga de hambre puedan recibir visitas de personas que se suman a la causa. Durante una presentación a los medios, los dos activistas han denunciado los ataques de la justicia española contra el catalán y contra el movimiento independentista y han hecho un llamamiento a la movilización y a "plantar cara" a estos ataques. De hecho, Sastre ha acusado directamente a los jueces como "culpables" y ha pedido que "primero pongan orden en su casa", en relación con las pocas sentencias que se hacen en catalán.
En el caso del País Valencià, ha dicho, únicamente hay un juzgado de los más de 300 que lo hace. ¿"Cómo se atreven a imponer un 25% de castellano en las escuelas si los jueces únicamente hacen un 7% de sentencias en catalán en Catalunya?", se preguntaba con indignación el docente balear, actualmente jubilado. Por eso ha hecho un llamamiento a "confrontarse contra los jueces, con nombres y linajes, porque, si no, es aceptar la derrota", ha dicho.