Casi 7 años después de la incautación de las obras de Sixena el caso sigue enfrentando Catalunya y Aragón. Ahora, el gobierno del Aragón, en manos del PP, ha anunciado que quiere abrir durante el primer trimestre de 2025 la exposición de las obras de Sixena que se encuentran al monasterio desde que fueron trasladadas del Museo de Lleida en aplicación del artículo 155 en Catalunya. Hace más de dos años que los bienes no se pueden ver junto a unas obras de reforma y mejora del monasterio de Vilanova de Sixena, que según parece estarían llegando al final. El presidente aragonés, Jorge Azcón, ha visitado por primera vez el monasterio y ha asegurado que las obras están en un "excelente" estado de conservación y ha detallado que las instalaciones estarán abiertas a todos aquellos que "tengan curiosidad de conocerlas". En este sentido, ha asegurado que están invirtiendo más de 2 millones de euros y actualmente se ha hecho la licitación por la museización de los antiguos dormitorios de las monjas, que es la parte que se ha reformado. Precisamente, en este espacio está donde Azcón ha atendido los medios de comunicación.

Exposición de las obras de Sixena

Aragón prevé que se exponga una gran parte de las 44 obras que se sacaron del Museo de Lleida el 11 de diciembre del 2017 con la entrada de la Guardia Civil en el equipamiento museístico. En este sentido, Azcón ha reconocido que será necesario hacer un "importante trabajo de difusión y promoción" del monasterio porque el objetivo es que reciba muchas visitas. La preocupación sobre el estado de conservación de los bienes es una constante, ya que hace más de dos años que están cerradas, y en varias ocasiones se ha pedido explicaciones y se ha puesto en cuestión por varios expertos a raíz de las condiciones de temperatura y humedad en el interior de monumento. Azcón ha afirmado que el estado es excelente y ha remarcado que los técnicos aragoneses "han hecho un trabajo magnífico" desde 2017.

Azcón ha explicado que cuando las obras fueron expoliadas de Lleida ya se condicionó el espacio para asegurar su conservación en la Sala Capitular, que es donde este miércoles se han mostrado. Anteriormente, se habían instalado en el antiguo comedor, que está donde se podían ver cuando el monasterio estaba abierto. Antes de la reapertura del monasterio durante el primer trimestre del próximo año también habrá que hacer obras al claustro. Una de las cuestiones principales será nivelar el suelo y también ajardinar la parte interior. Estos trabajos se alargarán unos dos meses, según el gobierno de Aragón. En cualquier caso, el anuncio de la reapertura del monasterio llega con un retraso considerable, ya que cerró el julio de 2022 por unos trabajos que tenían que durar unos meses y acabó en el 2023. De hecho, el pasado mes de julio, la Justicia de Aragón, que vendría ser un ente como la Sindicatura de Greuges en Catalunya, pidió explicaciones sobre la situación del monasterio de Sixena y su cierre indefinido.

Sentencia del Supremo

El presidente de Aragón ha detallado que el trabajo en Sixena no acabará con la reapertura del monasterio y la exposición de los bienes. Además, se ha mostrado convencido que el Tribunal Supremo ratificará las sentencias de los tribunales aragoneses a favor del retorno de las pinturas murales que había a la Sala Capitular y que ahora se encuentran en el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC). Según Jorgé Azcón "es de justicia que estas pinturas murales vuelvan a Aragón porque son de los aragoneses". Por eso, ha asegurado que cuando dicte la justicia, el gobierno de Aragón pedirá "la ejecución inmediata" de la sentencia para que los murales "hace demasiados tiempos que están en un museo que no corresponden y tienen que estar en Sixena para poder ver una obra completa en su globalidad".

El pasado mes de marzo el TSJC desestimó el recurso de Lluís Puig y confirmaba el juicio por las obras de Sixena, así como las fianzas del auto de febrero. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) juzgará al exconseller de Cultura porque es diputado (de Junts), mientras que el exconseller Santi Vila será juzgado en un penal de Barcelona. La fiscalía pide una multa de 6.000 euros por desobediencia porque no entregó las 44 piezas del monasterio que había al museo leridano y que finalmente se llevó a la Guardia Civil en pleno 155. Por su parte, el Ayuntamiento de Vilanova de Sixena quiere dos años de inhabilitación y una multa de 99.000 euros en Puig —también 11 meses de prisión para Vila y multa de 162.000 euros.